por Santiago Follet La semana pasada destacábamos lo poco que había durado la fachada de la Copa del Mundo para ese intento macroniano de mostrar una imagen exitosa y feliz. Y eso que no sabíamos todavía lo que estaba por pasar inmediatamente después. En efecto, el primer “hincha” de Francia pasó de posar en todos los medios posibles, uniendo su popularidad al éxito del equipo de fútbol, al más absoluto...