Finalmente, ayer se realizó el primer paro de estatales nacionales contra el plan de despidos y ajuste del gobierno de Macri. Un paro muy esperado por las y los trabajadores estatales que desde diciembre, con los primeros anuncios de despidos, estamos en pie de guerra en cada sector. Un paro que fue convocado por la conducción de ATE Nacional, sin plenarios y asambleas mediantes, pero que el conjunto de trabajadores tomó rápidamente en sus manos. Es que los despidos efectivos y las amenazas de otro tanto, junto con la clara extorsión que esto significa para la discusión salarial, ha despertado la reacción de los y las trabajadoras.

Esto se expresó rotundamente en la movilización hacia Plaza de Mayo; fuimos más de 25 mil los y las trabajadoras que salimos con nuestras banderas a las calles a luchar. Pero se expresó también en la participación masiva de estatales de base; a diferencia de los paros a los que nos tenían acostumbrados la burocracia, donde se ponía en juego “el aparato” de cada dirigencia, esta movilización fue protagonizada por los y las trabajadores de cada sector. Ni el calor agobiante que nos acompañó toda la jornada pudo aplacar las ganas de cantarle a Macri que no vamos a dejar pasar ni un despido, que “no somos ñoquis ni acomodados, somos trabajadores precarizados”, al igual que las pancartas hechas por cada compañero y compañera con las exigencias del pase a planta, y de la reapertura de las paritarias. Muchas banderas aparecieron por primera vez en escena, hechas por las y los trabajadores para estrenarlas en el paro.

Así fue el caso de los casi Mil compañeros y compañeras del Hospital Posadas, que se movilizaron desde Morón. Este sector hace dos años se viene organizando por el pase a planta permanente, denunciando las condiciones de precariedad en las que trabajan. El actual gobierno de Macri lanzó una ofensiva terrible, acusándolos de “boicotear” aparatos del hospital, con la intención de así hacer pasar los despidos. Y mientras la burocracia de ATE dejaba correr el tiempo los trabajadores denunciaron “no somos saboteadores, somos trabajadores”, y fueron de a cientos a la Plaza de Mayo.

También estuvieron presentes trabajadores y trabajadoras del Hospital Sarmiento y Centros de Salud de San Martín, que a pesar de que la burocracia de su sector no se jugó ni un poco a convocar al paro, se hicieron presentes con su bandera. Este sector de trabajadores se viene organizando contra la precarización de la Salud Pública, y en el marco de los despidos que golpearon a los municipales de San Martín, decidieron organizarse y salir con todo.

Una enorme experiencia fue la de los compañeros y compañeras de la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia, que para enfrentar el ataque del gobierno se organizaron en asambleas de bases, y abiertas a todos los estatales (más allá de la repartición de la que dependieran) afiliados a todos los gremios y no afiliados, haciendo realidad la verdadera “unidad de los trabajadores”, obligando a que la burocracia de ATE tuviera que ‘moverse’. También las y los compañeros del Ministerio de Asuntos Agrarios fueron parte de un gran proceso de organización en su repartición, marchando con su propia bandera.

Fueron muchos los compañeros de distintas juntas internas de Ministerios Nacionales, donde los despidos fueron masivos, y a pesar de los contantes aprietes de los funcionarios y de la burocracia patronal de UPCN, hicieron efectivo el paro en sus lugares de trabajo y se manifestaron masivamente en las columnas que recorrieron Avenida de Mayo. Así es el caso del Ministerio de Cultura donde a fines de Enero despidieron a 500 trabajadores; las compañeras de Desarrollo Social, de Economía (dos días antes del paro anunciaron el despido de 13 trabajadores), Trabajo, Fabricaciones Militares, y la lista sigue…

Que hayan sido miles y miles los y las compañeras movilizadas, da cuenta que los estatales estamos en pie de guerra. Le marcamos la cancha al gobierno de Macri, ¡si quiere más despidos y salarios a la baja, estamos dispuestos a salir a pelear para enfrentarlo! Y también le marcamos la cancha a la burocracia de ATE que tardó dos meses en convocar a una medida de fuerza contra los 25 mil despidos, y a la burocracia ultra patronal de UPCN que no sólo no hizo nada para defender a los trabajadores sino que entregó listas para los despidos.

Fue masiva la movilización, también, porque la convocatoria de ATE fue tomada por otros sindicatos y organizaciones políticas, haciendo del paro estatal una jornada de lucha política contra el ataque del gobierno de Macri hacia los trabajadores. Esto demostró que frente a la ofensiva de este gobierno reaccionario, es indispensable responder con la más amplia unidad que impulse la acción de los trabajadores, acción que permita procesar la experiencia con la burocracia sindical.

La movilización de más de 25 mil personas a la plaza de mayo desterró completamente los resabios que quedaban del verso de los “ñoquis”: ¡Macri quiere despedir trabajadores para achicar el gasto fiscal y extorsionarnos en las negociaciones salariales! Y a pesar de la campaña del miedo que intenta instalar UPCN, el paro de ayer nos deja mejor preparados y con más fuerza para enfrentar los nuevos despidos que ya están en puerta; organizando asambleas y cortes cuando lleguemos nuestros trabajos y hay más listas.

Esta demostración de fuerza del 24 tiene que ser nuestro piso, tenemos que profundizar la lucha, porque Macri ya anunció nuevos despidos y paritarias a la baja. Ya no hay excusas para planchar la lucha, los y las estatales demostramos que estamos dispuestos a pelear para defender nuestros puestos de trabajo. Es urgente volver a convocarnos en asambleas de base inter-gremiales para votar la continuidad de un plan de lucha, exigiéndole a ATE, y a todos los gremios estatales, que convoque a nuevas medidas de fuerza ya para pararle la mano a este gobierno reaccionario.

 

Marina H. – Delegada ATE Capital

Corriente Nacional Carlos Fuentealba

Estatales del Nuevo MAS

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