Reportaje a un trabajador del ministerio de educación de la nación

 

A propósito de la macartista campaña del gobierno de Macri para justificar los miles de despidos de trabajadores y trabajadoras estatales, entrevistamos al compañero M, que es empleado en el Ministerio de Educación de la Nación.

 

P: ¿Cómo fue la asunción del nuevo ministro, hubo algún cambio?

 

M: Lo único que llegó de la nueva gestión fue una invitación para un brindis por la asunción de Bullrich. Pero eso fue lo único que llegó. Después es todo incertidumbre, todo silencio, nadie comunica nada. De hecho, hasta donde yo sé no están todos los puestos cubiertos, ni en las subsecretarías, ni en las direcciones. La mayoría de los pisos estamos todos en la misma. Nadie sabe si el programa en el que trabaja va a tener continuidad, porque de hecho nadie sabe quién va a tener continuidad. Y aparte en el aire está todo el tiempo la amenaza o el temor de que nos pueden echar o peor, porque en realidad, ni siquiera sería “echarnos”, no nos renuevan los contratos y punto. Pero esto, lamentablemente, también es algo que ya viene de la gestión anterior. La gestión anterior se la pasó colgando carteles de cuidá tu trabajo, exigí estar en blanco pero acá nosotros… Yo entré acá a trabajar en el 2011 y hasta que concursé el año pasado, siempre estuve con contrato por un año comomonotributista: el ministerio está lleno de monotributistas.

El año pasado se abrieron los concursos y para poder concursar tenés que ser planta transitoria, entonces los jefes nos pasaron a transitoria para poder concursar. Después el concurso dependía de cómo te prepararas, pero te abrían la posibilidad de concursar. Pero hay gente que estuvo 15 años contratada, incluso gente que tenía oficina propia, que tomaba decisiones y aun así estaba contratada. La situación laboral siempre fue muy precaria, y los sueldos netos(una categoría D) están en 8 mil pesos, y la canasta básica está en 15 mil. La situación contractual siempre fue bastante precaria, con contratos. Los chicos de conectar igualdad, por ejemplo, tiene contratos por universidades, de hecho son mucho más precarios, ni siquiera son empleados del ministerio.

 

P: ¿Y cómo se vive la campaña acerca de que todos son ñoquis?

 

R: Lo que se vive en este momento es que por ahí la gente se unió más dentro del ministerio, al margen de sus convicciones políticas. En realidad, el tema de los ñoquis… qué se yo… yo laburaba descargando camiones y eso pasa en cualquier laburo, hay gente que labura y gente que no. Lo que pasa es que en la administración pública o en el Estado, está arraigada la idea de que hay muchos ñoquis. Si viniera de cualquier otro gobierno, de otro tinte político…, pero al venir de un gobierno neoliberal, es achique del gasto público, achique del Estado.

En realidad el discurso de los ñoquis es típico del discurso neoliberal para ajustar el gasto público. Mismo Michetti dijo que con respecto a lo del Senado que no había tenido tiempo para mirar uno por uno. O sea, que ahí ya te da la pauta de que ni siquiera contemplaron el tiempo de evaluación de los contratos, llegado el caso. Si se hubiesen tomado el tiempo de evaluar los contratos, ahí les podés dar un poco de crédito de que están evaluando para echar a los ñoquis. Pero si ya desde el vamos están reconociendo que ni se toman el tiempo de evaluar cada caso, te da la pauta de que el plan primordial era echar. O sea, recortar el gasto.

La realidad es que yo laburo acá hace cinco años y se labura un montón. Yo nunca fui kirchnerista, de hecho también hubo presión, también antes del cambio de gobierno había una cierta presión durante la gestión kirchnerista con respecto a “votar a Scioli para cuidar la fuente de laburo tuya, de tus amigos…” y aun así yo a Scioli no lo voté. Mucho menos a Macri. Pero en realidad desde que estoy acá en el ministerio se labura un montón y se labura un montón también por el hecho de que la gestión anterior en muchos aspectos hacía agua. Y los que sosteníamos el programa éramos los laburantes, los que estamos más abajo en el escalafón salarial, somos los que siempre sostuvimos los programas.

Nosotros arrancamos con los programas de internet. Yo entré a laburar en la mesa de ayuda. Laburábamos directamente con las escuelas. Éramos el contacto entre todas las escuelas del país y el ministerio. O sea que sacaban un programa de internet para 5 mil escuelas. Llamaban las 5 mil escuelas al teléfono nuestro o se comunicaban por mail. Salió primaria digital y todas las escuelas del país llamando ahí. Y en la mesa de ayuda éramos 4. Era cortar el teléfono y levantar, cortar y levantar… un call center. Pero un call center de asistencia técnica donde tenías que explicarle a un tipo que estaba en el medio de la Puna cómo configurar un ruter y el tipo te estaba llamando de un teléfono y la escuela estaba a 4 kilómetros del colegio. Y había que ponerle mucha onda, para que los equipos funcionaran, para que no fuera simplemente entrega de equipamiento y ya. Porque eran mucho nacional y popular, pero le tiraban los equipos por la cabeza y no les explicaban nada. Iban, cortaban la cinta, y ya fue. Pero detrás de eso había un montón de gente que siempre laburó un montón para que esos programas funcionaran.

Después de parte de las autoridades, los coordinadores, los directores… son lo mismo, esté la gestión que esté. Para llegar a un puesto así tenés que tener una cierta mentalidad, y es la misma para cualquier gestión. Lo que pasa es que cuando ves las caras que están llegando acá ahora con la gestión de Macri… Antes por ejemplo, tenías un AG, un asesor gubernamental que llegaba a una secretaría y el tipo hacía 25 años que trabajaba en el Estado. Ahora en subsecretaría de Coordinación administrativa tenés un empresario sojero. Ese tipo de perfiles. El mismo Bullrich. Es un tipo que ha votado a favor para que lo dejen jurar a Patti…

 

P: Hasta ahora entonces, la presión es a través de rumores…

 

R: Lo que hay, que me resulta más peligroso, son las situaciones cotidianas. Llegan auditorias, o por ahí te llega un mail a tu mail del ministerio y te caen ahí en el piso y te empiezan a auditar. A mí ya me auditaron hace dos o tres semanas. Llegó un muchacho del PRO todo rubio, con una Mac, con una sonrisa, haciéndose el simpático… En otros lugares, se dieron situaciones más complicadas, que llegaron las nuevas autoridades al sector, les hicieron abrir los Facebook enfrente de las autoridades para saber si habían posteado algo en contra de Macri o qué postura política tenían. Hubo sectores donde también los obligaron a abrir la máquina para ver qué información tenían o guardaban o lo que sea. Para mí es muy jodido. Estamos hablando de la libertad de cada uno. Parece como una dictadura disfrazada de democracia.

Yo con la gestión anterior también tuve un montón de problemas, votaba a la izquierda, y tuve problemas con gente que era de La Cámporao de Nuevo Encuentro, no cabecillas, militantes y cada dos por tres había roces. Porque los kirchneristas siempre tuvieron un postura muy soberbia y muy denigrante de las otras fuerzas políticas. Yo estuve sentado sentado frente a mi coordinador, muy nacional y popular, y me ha dicho fíjate lo que decís, fíjate lo que pensás, porque si esto llega a la coordinadora del programa te pueden echar. O mirá que echaron a diez tipos de Tecnópolis por pensar diferente. Y así se manejaron de la misma manera. La diferencia es que a los macristas no les interesa disimular ni mentir nada.

Igual había cosas que eran super válidas. Con el programa conectar igualdad se entregaron 5 millones de netbook y yo laburé con la gente de ahí y se laburaba una bocha. Y aparte eras empelado multifunción. Nosotros viajábamos a alguna provincia a migrar netbook de un programa a otro y había que viajar, cargábamos y descargábamos la camioneta, después viajábamos y nos poníamos un saco y dábamos el taller para los docentes y después volvíamos y atendíamos las consultas de las escuelas. Y siempre se laburó así en los programas de equipamiento para las escuelas.

Faltaban recursos, pero yo no usaría la palabra ñoqui jamás. Por eso menciono mi desacuerdo con los K. Yo jamás fui K, ni defiendo a los k, pero ahí siempre se laburó, no podría decir jamás que ahí hay ñoquis, se laburaba un montón, porque si no, no se podrían haber sostenido esos programas.

Aparte las autoridades que tomaban las decisiones muchas veces se desentendían, no tiraban ni una soga. A veces pasó que un programa, que era un convenio con secretaría de comunicaciones de DeVido, la secretaria de comunicaciones cortó la cinta y jamás nos dio pelota de nada. De 800 reclamos que le cargamos de escuelas con problemas de internet, no visualizó ni siquiera uno. Están sin resolver los 800. En el medio, un montón de empresas, como Telefónica, Telecom curraron a lo loco por las licitaciones, y para las escuelas fue una lotería, algunas tuvieron internet, otras no. Algunas tuvieron internet un día, otras tuvieron internet tres años, fue así. Pero eso dependía de la voluntad política del superior. Pero el PRO le viene a mirar la computadora directamente a los laburantes.

 

P: ¿La auditoría en qué consistió? ¿Es la primera vez que te pasa?

 

R: Sí, porque dentro de todo yo mantuve los mismos jefes siempre. Pero esto que te digo, el ministerio siempre se manejó con contratos por un año. O sea, que tenés una situación de laburo muy precaria. Tenés laburo un año. Y tener laburo un año es lo mismo que te digan portate bien, porque no te renuevo y punto. También hay contratos por tres meses, seis meses, tardás cinco o seis meses en cobrarlo. Una cosa es que quieran saber cuánta gente hay, qué tareas desarrollan, el punto es que no están buscando eso. Están buscando militantes y eso también es una excusa. Están buscando recortar el gasto público. No tiene mucha más ciencia que eso. Todo lo demás, lo de los ñoquis, son pretextos. La auditoría fue una entrevista, que contáramos hace cuánto que trabajamos, que contáramos qué habíamos hecho en estos años, que describiéramos nuestros perfiles, que estudiamos, y por último nos ofrecieron ir a la ex ESMA que es donde se van a unificar todos los programas de equipamiento de tecnología, o eso es lo que dicen. Mi respuesta fue no. O sea que no sé si voy a conservar el laburo.

Nosotros tendríamos que haber concursado en marzo y terminamos rindiendo en octubre y después nos dejaron a todos culo para el norte, no salió la resolución y técnicamente tenés que tener un año para tener la estabilidad definitiva, aún en planta permanente. O sea que yo técnicamente aun habiendo ganado el concurso estoy en una situación de inestabilidad porque están también auditando los concursos y están dando de baja concursos. Es un poco más complicado y se meten con quilombo con el sindicato, haciendo eso. Pero no sé, técnicamente pueden recortar un montón de contratos precarios, convenios con universidades. Si es por precariedad de los contratos, no quiero exagerar, podrían echar al 70 por ciento del ministerio sin indemnización. Se dice muy poco, hasta hoy…

 

P: ¿Hubo algún tipo de medida, asambleas?

 

R: Sí, pero antes del cambio de gestión. Para presionar a la gestión anterior a que renueve los contratos, hubo sentadas en el hall del ministerio. Pero lo mejor que se consiguió fue una extensión del contrato hasta abril-mayo. Pero estás hablando de miles de laburantes. Hay sectores en los cuales nadie sabe siquiera quién es el jefe nuevo, hay montones de sectores acéfalos. Hay cargos jerárquicos acéfalos.

Asambleas desde que está la nueva gestión no hay. Antes pasaban mucho los delegados de ATE y de UPCN, pero ya desde diciembre se ve muy poco. La gente está muy cagada, todos tienen miedo de perder el laburo. Yo hace como un mes que no los veo. Antes pasaban, te dejaban un volante. Espero que sea porque están ocupados haciendo algo… Pero los cabecillas de los gremios también transan. Las bases no, están en la lucha. Pero a los que están más arriba, no les importa.

La gente está con mucho miedo. Un montón de compañeros cerraron su Facebook, lo limpiaron, cambiaron la foto de perfil, cambiaron el nombre, borraron tweets, borraron cosas de sus computadoras.

 

P: Es como una persecución que se está viviendo.

 

R: Están castigando mucho a la gente psicológicamente. Las últimas dos semanas… un día te dicen que tenés laburo, otro que no, otro día te dicen que te van a cambiar de laburo… todos los días así. EnPizzurno desalojaron sectores de la peor manera, es tu lugar de laburo, donde estás todos los días, donde pasás 8 o 10 horas con tus compañeros, y de repente les dijeron que fueran a buscarse otro lugar o solos… Lo que llama la atención acá es que están siendo muy meticulosos, se están fijando uno por uno y están mirando cuándo entraron. Lo que pasa es que la gestión anterior fue muy desprolija porque efectivizaron de golpe cuando se dieron cuenta que no seguían. Y todos esos contratos van a volar, porque es la excusa perfecta para Macri, porque dice que son todos de La Cámpora. Y la verdad es que no. Hay mucha gente que labura hace un montón, que está hace mil esperando el concurso, esperando un contrato más estable y se lo dieron de apuro el último año y va a perder el laburo por una sospecha que está completamente infundada y que encubre un propósito más negro, que es achicar el Estado y ajustar. Después además dicen ah, en el Estado gana 8 o 10 lucas… pero en el Bingo de Morón se gana 15. Pero se mira a los trabajadores del Estado con una carga… pero esto va a afectar todos los aspectos. Porque están siendo totalmente explícitos, lo dijo Prat Gay: fíjense si quieren salario https://www.mas.org.ar/wp-admin/post-new.phpo quieren conservar el laburo.

 

P: ¿Querés agregar algo más?

 

R: ¡No somos ñoquis!

 

Nota: por obvias razones no revelamos el nombre del compañero, pero le agradecemos la entrevista

Dejanos tu comentario!