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¿Por qué votar al Nuevo MAS y no al Frente de Izquierda?

En el marco del debate político abierto por las elecciones presidenciales presentamos esta carta dirigida a los compañeros y simpatizantes de Patria Grande, que han decidido no presentar candidatos nacionales. A continuación les presentamos algunas razones para votar a los candidatos del Nuevo MAS.

El marco político de la elección

Las próximas elecciones nacionales tienen una particularidad “histórica”: se va votar la continuidad o el cambio del proyecto político que tienen más de una década gobernando el país. De un lado está el kirchnerismo que se vistió con un ropaje más derechista y conservador con Scioli. Y del otro lado está Macri que representa un candidato de corte más liberal. Ambos son candidatos de los patrones y vienen a realizar el trabajo sucio para los empresarios: un ajuste económico sobre la espalda de los trabajadores. En lo único que se diferencian es en los “tiempos” y las “formas” en las que tratarán de hacerlo. Pero todo indica que se encontrarán con la resistencia de los trabajadores y de la izquierda junto a ellos.

Más abajo en las encuestas hay otros candidatos que también representan intereses sociales patronales pero que no tallan en la disputa presidencial, como Massa o Stolbizer que tratan de mostrarse por fuera de la polarización entre los de arriba pero no dejan de ser variantes de lo mismo.

Sin embargo hay otro campo político bien distinto: el de la izquierda y los trabajadores. En la escena nacional hay tres opciones electorales de la izquierda: el Nuevo MAS, el Frente de Izquierda y el MST. Insistentemente desde el Nuevo MAS le hicimos saber al FIT nuestra intención de integrar su frente, lo que fue denegado una y otra vez sin ningún tipo de respuesta. Es más, hicimos muchos esfuerzos para lograr la unidad, que se expresan en cartas públicas para sentar de forma explícita nuestra intención unitaria, pero ellos se negaron a decir una palabra. Por lo que presentamos candidatos de forma separada.

Con respecto al MST no queremos polemizar en este punto porque entendemos que desde que apoyaron el “paro” de los patrones del campo en el 2008 y luego la “huelga” de los gendarmes en 2012, no es considerado entre las filas de la izquierda como una organización con independencia política. Por eso nos dedicaremos a polemizar con el Frente de Izquierda quienes se plantean ser una opción política real pero ha entrado en una espiral de crisis y división interna por su constitución estrictamente electoral, sin bases real de construcción.

El Frente de Izquierda no sirvió para unir las luchas

En primera lugar es importante señalar que el Frente de Izquierda fue en el 2011 y 2013 un punto de confluencia de las expectativas de una importante porción de trabajadores y jóvenes que vieron que la izquierda (una parte de ella) se unía para dar la pelea electoral con más fuerza. En su momento insistimos en ser parte de esta experiencia pero la negativa de sus integrantes fue determinante. Según ellos al no tener nosotros legalidad nacional sólo podíamos apoyar al FIT pero no ser parte del frente. Es decir, utilizaron un argumento “legal”, una normativa impuesta por el gobierno que nos quitó la legalidad nacional para excluirnos de dicho frente.

Pero desde el Nuevo MAS dimos una gran batalla política en las elecciones del 2013 y conquistamos más de 100.000 votos, lo que nos dió una enorme fuerza para llegar a donde estamos ahora. En este marco pusimos en pie una campaña de extensión nacional del Nuevo MAS que tuvo entre sus resultados la obtención de la legalidad nacional. A partir de esto lanzamos una nueva propuesta unitaria al FIT, entendiendo que la excusa de que “no teníamos legalidad” no estaba más. Pero se negaron si quiera a reunirse a discutir esta posibilidad, mostrando que no tienen realmente una intención de transformar al frente en algo que crezca y se potencie, sino mantenerlo sólo en beneficio electoral de los miembros que forman parte. Por tanto, desde el Nuevo MAS nos lanzamos de lleno a presentar nuestros candidatos y a poner en pie una campaña política con la consigna “Por una alternativa socialista de los trabajadores, las mujeres y la juventud”.

Entendemos que la razón de la negativa del FIT de sumarnos radica en que se han puesto de acuerdo sus miembros en que sea solo una “cooperativa electoral”, es decir, una alianza que sólo sirva para juntar votos y meter diputados. Pero no un frente que organice y movilice a los trabajadores en las circunstancias de la lucha de clases. Por eso no ha servido para levantar una voz unificada y ofrecer una posición común frente a los principales hechos políticos de la Argentina de los últimos años, cuestión que hubiese sido de muchísima utilidad que un frente que saca 1 millón de votos se presente como alternativa en donde las cosas se definen realmente: en la lucha de clases.

Nombremos algunos de los hechos más sobresalientes donde el FIT debería haber servido pero brilló por su ausencia. En primer lugar hay que mencionar cuando fueron los cacerolazos gorilas del 2012.  El PO dijo que sus reclamos eran justos pero no acordaba con su dirección. Pero el FIT como frente no emitió palabra. Para nosotros fue bien claro: no había que darles ningún apoyo porque se trataba de un reclamo de los sectores privilegiados de la sociedad que se oponían al gobierno nacional pero desde intereses ajenos y opuestos al de los trabajadores. Pero el FIT brilló por su ausencia y no actuó como un actor que haga emerger los reclamos de los de abajo.

Otro hecho de importancia fueron los paros generales. Nunca tuvieron una posición común y ya en los 2 últimos el PO actuó por un lado y el PTS por otro, dividiendo las acciones de lucha de los piquetes. Esto tiene la gravedad que ya no sólo no se ponen de acuerdo para tener una misma visión sobre un hecho sino que además actúan de forma divisionista frente a una acción de lucha, cuando más que nunca se necesita la unidad. Es decir, que no viene sirviendo para organizar la lucha contra el ajuste. Cuestión que también quedó clara cuando fue el Encuentro Sindical Combativo que podría haber servido para nuclear a los trabajadores para la lucha. Pero en su lugar el PO dijo que “era un espacio contra el FIT” y el PTS claudicó en la pelea por defenderlo y ampliarlo.

En tercer lugar al FIT no sirvió como alternativa cuando fue la crisis de los fondos buitres. No tuvieron posición común de ningún tipo. Mientras el PTS llamaba a una “consulta popular”, el PO se negaba a llamar a una movilización conjunta por el No Pago de la Deuda Externa, política que sostuvimos desde el Nuevo MAS como salida práctica ante el inmovilismo el FIT. En momentos donde el imperialismo extorsionaba para que se le pague sus intereses usureros hacía falta que desde la izquierda se llame a una Jornada Nacional de Lucha que diga bien claro que no queremos pagar un peso más. El FIT y no sirvió para esto porque sólo piensa en “juntar votos” y se cuidó como la peste de aparecer levantando con claridad la consigna del “no pago de la deuda” por temar “quedar mal” con un sector del electorado. Un nuevo FIT refundado debería poner como punto central no sólo “declararse” por el “no pago” sino impulsar su lucha concreta.

Otra preocupación creciente que viene de las luchas es la necesidad de legalizar el derecho al aborto libre, seguro y gratuito en el hospital. A lo único que se dedicó el FIT es a decir que presentaban el proyecto de ley pero jamás llamaron a una movilización nacional para hacer fuerza en las calles para que el Congreso y el gobierno lo aprueben. Nunca confiaron realmente que es por medio de la movilización que este derecho puede conseguirse. No han aprovechado la visibilidad mediática que dan tener diputados para potenciar esta lucha y desde ese lugar impulsar la movilización. Ni hablar que en sus spot de campaña ni mención se hace de este derecho prohibido para las mujeres. Desde el Nuevo MAS y Las Rojas hemos puesto este derecho en el centro de nuestra campaña porque entendemos que es la piedra angular en la lucha contra el patriarcado.

 

Hay que refundar el FIT sobre un acuerdo no electoralista

Así, al estar vertebrado sólo como “frente electoral” y no sobre una base común de acción política…. el FIT llega al momento actual en una bochornosa división en su seno entre el PO y el PTS. División que se hace por entera responsabilidad de ambas fuerzas políticas que no han dado ningún debate de hacia dónde debería orientarse el FIT. El PO ni siquiera menciona la razón de por qué van divididos, cosa que implicaría reconocer que es por pura rosca de cargos. Y lo único que esgrimió el PTS fue que su candidato “es más joven”, cosa que en sí misma no alcanza como argumento político para dicha división. Deberían explicarle a todos los trabajadores y luchadores por qué llegaron a esto, cuál es la razón política, si es que las hay. En realidad, no es más que la consecuencia lógica de la razón que los unía: la obtención de cargos parlamentarios. Y por lo tanto a la hora de repartir los lugares en las listas que podían ser elegidos no hubo acuerdo.

Desde el Nuevo MAS planteamos que el Frente de Izquierda tiene que re-fundarse sobre una nueva base de acuerdos políticas no centrados sobre la “rosca de cargos” y la obtención de parlamentarios. Un acuerdo político basado en la lucha real en torno a algunos puntos centrales y una clara delimitación política de todas los sectores políticos patronales y de la burocracia sindical. Un acuerde que logre transformar a la izquierda en un actor político no sólo electoral sino real, es decir, un actor que movilice y nuclee a miles en una perspectiva socialista.

Lamentablemente los partidos que integran el FIT han demostrado que no tienen ningún interés en avanzar en este sentido. Por eso llamamos a apoyar al Nuevo MAS en estas elecciones como forma de fortalecer esta propuesta de formación de un nuevo frente de izquierda sobre nuevas bases políticas.

Dos campañas electorales muy distintas

Desde que existen los spot de tv gratuitos las campañas electorales los tienen de protagonistas. Por una razón: es la principal forma de transmitir las ideas a millones de personas. Por eso a la hora de evaluar el contenido de una campaña electoral lo primero a tener en cuenta es el contenido político de los spot televisivos. Claro está que los candidatos como Scioli, Massa y Macri ocultan en sus spot su verdadero plan de gobierno: ajustar a los trabajadores. Lógicamente: nadie los votaría.

Por otro lado están los spot de la izquierda. Aquí vale aclarar que los partidos de trabajadores no tenemos siempre la oportunidad de dirigirnos a millones. Por lo tanto sería un gravísimo error desaprovechar este momento para transmitir ideas que sirvan para fortalecer las luchas de los de abajo y al mismo tiempo señalar un rumbo político en un sentido progresivo para los intereses de los trabajadores. Pero aquí en este punto los spot del FIT no sirven a estos objetivos. Con el correr del tiempo han lavado sus campañas electorales haciendo más hincapié en la figura del candidato que en el contenido.

El PTS llegó al punto que de no proponer nada en sus spot, sólo “renovar y fortalecer el FIT” pero dicen con qué objetivo. La campaña que hacemos desde el Nuevo MAS es muy distinta y tiene como eje rector la idea de que “gobiernen los que nunca gobernaron: los trabajadores”. Idea que nos parecía fundamental plantear porque no alcanza con que los trabajadores voten a la izquierda. Sino que buscamos decir abiertamente que los problemas de fondo de la sociedad no se van a resolver hasta que ellos gobiernen y pongan en pie la construcción del socialismo.

Desde el Nuevo MAS pensamos que luego del desprestigió que el stalinismo le generó a las ideas del socialismo, es una tarea de las nuevas generaciones militantes la de volver a poner sobre la mesa que el norte por el cual luchamos es una nueva sociedad. Y que esa sociedad no es cualquier cosa indefinida, sino que la lucha de los trabajadores del último siglo y medio la señaló con claridad como socialismo. Las campañas del FIT están completamente ausentes de esta mención y sólo se limitan a pedir el voto para meter más parlamentarios, pero no para desarrollar al frente de izquierda como organización de lucha y para politizar a amplias franjas de los trabajadores en las ideas del socialismo.

Votanos en las PASO para que esta política llegue a Octubre

Por estas, entre otras razones, creemos que la experiencia del FIT tal como ésta viene demostrando, ha sido inútil para potenciar la lucha de los trabajadores, las mujeres y la juventud. Y que no viene sirviendo, por tanto, para poner en pie una alternativa que, partiendo de las necesidades que exige la lucha, utilice la campaña electoral para impulsar el desarrollo de la conciencia de los trabajadores y señale el norte del socialismo como necesidad política. Para que esta campaña no quede a mitad de camino, desde el Nuevo MAS llamamos a toda la militancia y simpatizantes de Patria Grande a darnos su apoyo.

Eric “Tano” Simonetti, pre-candidato a Intendente por la Ciudad de La Plata

 

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