Caso Daniel Solano

 

 

Un día antes de que se cumplieran 11 años del asesinato de nuestro compañero Carlos Fuentealba en manos de la policía Neuquina de Sobisch, murió Gualberto Solano, el padre de Daniel Solano, joven trabajador golondrina de la fruta que fue desaparecido por la policía rionegrina al servicio del apriete de las multinacionales frutícolas. Había impulsado un reclamo laboral en el marco de la cuasi reducción a la esclavitud que significan las condiciones de trabajo en la cosecha que somete a miles de trabajadores golondrina.

 

En 7 años ni el gobierno saliente del radical Saiz, ni del FpV de Soria, ni el del filo-PRO Weretilneck esclarecieron lo sucedido después de que a Daniel lo levantara la policía a la salida de un boliche en Choele Choel. Fue Gualberto, su papá, quien con sus propias manos tapó el jagüel donde se suponía que estaba el cuerpo de Daniel para que los 7 policías implicados en su desaparición (que están en funciones al día de hoy con vía libre para amedrentar testigos) no interfieran aún más en la causa. Fue él quien vino de Salta a montar un acampe, iniciar huelgas de hambre y movilizar el Valle Medio para que existiera este juicio donde se encontró frente al rostro de la impunidad, lo que terminó acabando con su vida. El juicio por Daniel se da en este marco donde las patronales de la fruta, la policía y los gobiernos patronales, hacen y deshacen con la vida de los trabajadores golondrina cual patrones de estancia.

 

El jueves 5 de abril se reanuda el juicio en la Ciudad Judicial de General Roca. Todos los activistas, luchadores y corrientes políticas de izquierda tenemos que ir a levantar su bandera de justicia para Daniel. Gualberto era el querellante y sin él la fiscalía puede intentar maniobrar contra sus abogados, la única garantía es ejercer presión para que se desarrolle el juicio y continuar exigiendo justicia por Daniel y Gualberto.

 

 

Dejanos tu comentario!