Compartir el post "Por la estatización de SanCor, bajo el control de los trabajadores"
La sensación entre muchos trabajadores, es que se acabó la paciencia con el gobierno de Macri, muchos le dieron su voto en las últimas elecciones, pero se terminó el veranito. El gobierno mostró su verdadero rostro, aplicando políticas que benefician a unos pocos y siempre es para los de arriba. Y en concreto los trabajadores seguimos sufriendo la inflación que no cesa, los incrementos en las tarifas y transporte, y nos quieren conformar con paritarias miserables.
Pero estos no son los problemas más graves. Hace un largo periodo que en la industria se vienen produciendo despidos, y con el gobierno de Macri esto se agudizó, de ser una gotera pasó a ser un chorro constante que no hay forma de parar.
En SanCor lo podemos ver claramente, la empresa manifiesta estar en crisis, pero los trabajadores no somos los responsables de generarla, por tal motivo no somos los que tenemos que pagarla.
Ante esta crisis la única solución del gobierno y de la empresa es cerrar plantas y echar trabajadores, actúan en unidad, por un lado la “cooperativa” manifiesta que sobran 1000 trabajadores y por el otro el gobierno nacional poniendo plata solamente para pagar indemnizaciones a los compañeros que se quedarían en la calle.
SanCor cuenta con aproximadamente 15 plantas en todo el país, ubicadas centralmente en las provincias de Bs. As., Córdoba y Santa Fe. Actualmente hay cuatro que ya cerraron, dejando afuera 500 operarios. Esto originó en varias de ellas verdaderas puebladas en contra del cierre y de los despidos de los trabajadores.
En la provincia de Córdoba, por ejemplo, ya se vendió parte de la planta a otro grupo inversor. Vicentín compró la parte de yogures y postres, dividiendo al plantel de aproximadamente 450 trabajadores. El grupo inversor (ARSA) se quedó con 300 operarios, y los otros 150 siguen siendo empleados en SanCor. Estos últimos son mayoritariamente trabajadores de logística, preventistas y repositores, que quedaron en un limbo, la nada misma, a estos trabajadores prácticamente no se les paga y la política es meter miedo, porque “si se portan bien” y no hacen olas por ahí los contrata ARSA. No dejemos que nos atemoricen compañeros, cuando peleamos en unidad logramos torcer el brazo de la empresa.
Esto no sería posible sin la pasividad y complicidad del gremio (ATILRA). El sindicato no se jugó a fondo, ya que si bien llamó a una asamblea y a medidas parciales, no fue capaz de llamar ni siquiera a una medida de conjunto para parar esta sangría. La empresa despide y en algunos lugares no paga los salarios, y ellos están como si nada pasara. Ponce, el Secretario General, en un discurso en la planta de Moldes, en vez de denunciar al gobierno y a la empresa por semejante desguace y política criminal de ajuste sobre los trabajadores, arremetió contra aquellos compañeros que nos venimos organizando, para defendernos, ante la ausencia del sindicato, catalogándonos de “pelotudos”.
Esta verdadera burocracia sindical dice de apostar a que otro grupo inversor compre SanCor, dejando pasar el tiempo, y así las plantas del interior que no tienen tanto impacto mediático vayan cerrando sin que la comunidad se entere, y además los trabajadores se vayan desmoralizando y arreglando indemnizaciones, en vez de pelear por sus puestos de trabajo.
El movimiento obrero el 7/3 en el acto de la CGT, demostró las ganas de pelear que tiene, con una marcha de casi 300 mil trabajadores, gritando con todo “ponele fecha la puta que te parió”. Y ante la negativa de poner fecha al paro general, los trabajadores arremetieron contra sus dirigentes, haciéndolos correr y tomando el escenario del acto. Estos dirigentes ante la gran manifestación de bronca tuvieron que ponerle fecha al paro general.
Este es el camino compañeros, no tenemos que permitir que nos traten como material descartable. Ante cada ataque necesariamente tiene que haber una reacción.
Hay que exigir al gremio que llame a asambleas en todas las plantas, para poner en pie una gran lucha nacional en contra de los despidos en SanCor. Porque compañeros seamos realistas, el plan es ir por 1000 despidos, y si no nos toca a nosotros seguramente va ser al compañero de al lado. Hay que impulsar además marchas en defensa de los puestos de trabajo, así como lograr la solidaridad de toda la sociedad.
En el marco del paro general del 6 de Abril, hay que garantizar un parazo en todos los establecimientos lácteos, y hacer del paro una jornada activa, porque los dirigentes seguramente van hacer la plancha.
Por una gran lucha nacional de los trabajadores de SanCor
SanCor tienen que ser de los trabajadores, exigimos estatización bajo el control de los trabajadores
Basta de despidos y cierres de plantas
Por el pago de los sueldos adeudados
Trabajadores del Nuevo MAS