El pasado martes 18 y miércoles 19 se llevó adelante el operativo “Aprender” 2016, evaluando con un examen múltiple choice a estudiantes primarios y secundarios con motivo de “constatar” el nivel de la educación en nuestro país. Ya hemos profundizado en estas páginas cuáles son los objetivos finales del gobierno de Macri con este operativo, por este motivo en estas líneas nos limitaremos a mencionar que entre los principales se encuentra responsabilizar a los docentes de las “malas” calificaciones de los estudiantes, es decir, responsabilizarlos de la situación en la que se encuentra la educación pública. Ante esto, el rol de la burocracia sindical de CTERA y SUTEBA fue abiertamente traidor, al estilo CGT, “¿Y el Paro Nacional? -Bien, gracias”.

Sin embargo y a pesar de esto, la zona sur fue epicentro de los rechazos más activos. Los estudiantes se pusieron de pie, retomando los mejores métodos del movimiento estudiantil, organizándose en base a asambleas y con la toma de colegios lograron frenar el operativo y posicionarse en contra de las intenciones del gobierno. Aproximadamente diez colegios estuvieron tomados, entre estos estuvieron los más importantes de la zona, como el ENAM de Banfield, el ex Nacional de Adrogué y el Instituto Lomas de Zamora.

Estas históricas tomas se levantaron en su mayoría el mismo miércoles 19 por la tarde, una vez garantizado el triunfo parcial.La primera instancia del Aprender había sido impedida en sus colegios y también con el mérito de haber instalado el debate en los medios nacionales quienes no pudieron hacer oídos sordos. El levantamiento de las tomas fue precedido al igual que la mayoría de las decisiones, con asambleas colmadas de estudiantes. Quedaba planteada la necesidad de organizar acciones para el día que se tomara la segunda instancia, el martes 25.

La traición del kirchnerismo y la izquierda “cabeza de urna”

En la asamblea previa al levantamiento de la toma en el ENAM, el kirchnerismo propuso,  a través de la comisión directiva y un grupo de ex alumnos, que se realizara una movilización, ya “cocinada” desde arriba, al Ministerio de Educación el mismo martes 25 de octubre por la tarde, donde ellos se ofrecieron a garantizar el sonido, los micros etc. Esta medida que a priori parecía de lucha, tenía la trampa de no plantear ninguna medida para evitar el ingreso de los evaluadores.

A esta convocatoria se le fueron sumando algunos colegios como el Nacional de Adrogué, lugar en el cual se decidió la toma en una asamblea el lunes 24, apoyada en una fuerte vanguardia y que contaba con la presencia de las agrupaciones del ISFD N 41 que funciona en el mismo edificio. En el Nacional, a diferencia del ENAM donde el kirchnerismo dirigió la toma en su conjunto, los secundarios k organizados en La Revuelta, a pesar de que en el inicio habían convocado a una asamblea para organizar alguna medida de lucha contra el Aprender, al ver desbordada la situación por los estudiantes independientes y las organizaciones, se echaron para atrás rápidamente intentando romper la toma sistemáticamente, junto con sus hermanos mayores de Educar es Incluir (conducción del ISFD 41). Quedaron desprestigiados en un importante sector activista de los secundarios y terciarios en menor medida, que sin importar la inexperiencia se pusieron la toma al hombro.

Pero el rol de la izquierda también dejó que desear. En primer lugar, una vez levantada la toma decidieron junto con los k que la semana siguiente se realizarían finalmente las elecciones del terciario, que habían sido postergadasa raíz de la toma del edificio, dejando de lado la organización de medidas de lucha para el 25. Tanto el Partido Obrero como La Comuna prefirieron apostar a juntar los porotos que el kirchnerismo pareciera perder dentro de la vanguardia por el papel traidor que tuvo en la toma. En segundo lugar, se sumaron a la convocatoria de la movilización (a la cual después ni aparecieron) sin atinar siquiera a advertir que objetivo escondían los k: que en la segunda instancia pase el operativo echando por tierra lo logrado la semana previa.  Así, con la cabeza en las elecciones y sin propuestas de continuidad dejaron al libre albedrío a esa nueva generación de activistas que entró al mundo de la lucha.

En el caso del Instituto Lomas, se caracteriza por tener una amplia vanguardia de izquierda organizada alrededor del centro de estudiantes. Desde un primer momento tanto el bloqueo que se realizó en la puerta el martes 18 como la posterior toma fue producto única y exclusivamente de la decisión y dirección de los estudiantes a la cual gran parte de los docentes de la Institución se adhirieron.  En este colegio, el lunes 24 en asamblea, se decidió volver a garantizar el no ingreso de los evaluadores a pesar de tener un acta firmada por la inspectora distrital de que no se harían presentes,así como también participar de esta movilización.

Marcha y desborde a los k

Tal como se había votado y avalado en las respectivas asambleas el martes 25 de octubre estudiantes de distintos colegios se hicieron presentes en la Plaza de Lomas para trasladarse hasta Capital, debido a que los micros saldrían desde ese lugar. Deben haber tenido algún problema en el camino, suponemos, porque nunca aparecieron. Los mismos que impulsaron esta medida fueron los primeros en «arrepentirse».Una vez llegada la hora, comenzaron a poner una y mil excusas para que la marcha no se realizara pasando por arriba de la decisión de los estudiantes, ¡qué raro! Con los métodos bien conocidos por los burócratas, se jugaron al desgaste de los pibes que esperaban marchar haciendo votar una y mil veces si se marchaba o no, cuando una amplia mayoría ya había votado que sí, excusando que “nos van a reprimir”, “en Capital está lloviendo a cántaros”, “el sonido está volviendo” etc. El manotazo de ahogado fue intentar hacer votar por tercera vez cuando lo estudiantes se dirigían a la estación de trenes, tomar el consejo escolar. Una vez más los estudiantes hicieron valer lo que ya habían decidido no dejándose maniobrar y una nutrida columna se dirigió al Ministerio de Bullrich.

Una política para la nueva camada de activistas

Desde Tinta Roja y el ¡Ya Basta! fuimos parte importante de este proceso previo, durante y después de las tomas: impulsando, discutiendo, influenciando y poniéndole el cuerpo a todas las medidas. Una vez levantadas las tomas hicimos énfasis en no depositar confianza en las promesas de directivos e inspectores. Volver a las aulas no era para abandonar la lucha, tenía que servir para reagrupar fuerzas, poder hablar con nuestros compañeros que no se sumaron y los que se sumaron a las tomas también, porque la pelea no terminaba, había que garantizar el triunfo completo en nuestros colegios el martes 25. Nuestra política siempre fue apoyar y acompañar la experiencia de estos pibes que entran a la vida política en la pelea contra el Aprender y el gobierno de Macri para que una vez terminadas las tomas no vuelvan a clases como si nada hubiese sucedido.  Y si bien nuestras energías estaban puestas en que salieran los bloqueos decidimos acompañar la movilización porque así habían decidido los estudiantes. Y cuando vimos el accionar del kirchnerismo, no dudamos en impulsar la marcha junto con los estudiantes que se plantaban para que no cayeran en la desmoralización. Estas históricas tomas tienen que ser el comienzo de una mayor organización y unidad entre los secundarios en la zona y un ejemplo para los estudiantes de todo el país para cuando haya que enfrentar no solo la evaluación sino también las medidas prácticas y concretas contra la educación pública.

Es necesario que de esta experiencia donde el movimiento estudiantil se puso de pie, salga fortalecido para enfrentar los ataques del gobierno de Macri contra la educación pública, pero también contra los trabajadores, mujeres y el pueblo en su conjunto con la más amplia unidad de acción solo en las calles y con los métodos de los luchadores.

Desde Tinta Roja y el ¡Ya Basta! queremos empezar a debatir con el conjunto de los estudiantes estas líneas, por eso realizaremos dos plenarios el viernes 28 de octubre al cual invitamos a todas y todos los secundarios y terciarios a las 14hs y 18hs en nuestro local ubicado en Rivadavia 305 Temperley.

Flor Sur

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