Socialismo o Barbarie, periódico Nº 193, 21/01/11
 

 

 

 

 

 

Los primeros debates hacia las elecciones nacionales en ATE

Por una lista única de la oposición clasista

Estatales del Nuevo MAS
ATE-Lista Gris

Se realizó el día 11 de enero la primera reunión de la oposición de ATE-Capital. La misma tuvo como antecedentes el plenario convocado por ATE-SUR en diciembre y dos reuniones de ese espacio en el que están participando juntas internas, delegados congresales y activistas de Capital. La reunión se hizo en el piso 11º del INCAA, Instituto Nacional de Cine y Artes Visuales. Participaron la Junta Interna del INCAA, Junta Interna del Hospital Garrahan, una delegada del Ministerio de Desarrollo Social, un delegado del Centro Cultural Recoleta, Estatales en Lucha-PO, la Lista Marrón-PTS, Lista Gris-Estatales del Nuevo MAS.

El temario propuesto fue las próximas elecciones de ATE, en junio, y la intervención en la lucha de clases del año 2011.

Entre los debates que cruzaron la reunión se instaló fuertemente la necesidad de que la izquierda en las elecciones nacionales de junio vaya unificada y no pase lo mismo que en las de la CTA que hubo tres listas, ya que la valoración que hicieron de este hecho los compañeros del Garrahan, el INCAA y otros compañeros independientes fue negativa.

Cuando pidió la palabra la Marrón-PTS inmediatamente se refirió a que en las elecciones del sindicato no tiene importancia si la oposición va en varias listas, que lo importante es estar en unidad en la lucha de clases. Que es muy difícil ganar el sindicato si no hay una gran lucha como en su momento fue la del Hospital Garrahan y agregó que en estatales no pasa nada. Estatales en lucha-PO, en referencia a las elecciones, señaló que tenían que discutirlo colectivamente.

Para que no pase lo mismo, como demandan muchos compañeros, es necesario hacer un poco de historia y sacar conclusiones.

Lo primero que queremos señalar es que las elecciones en la CTA fueron un acontecimiento político y para nada rutinarias como llegó a decir el PTS.

El problema que se dio entre las filas de la izquierda independiente fue que los compañeros del PO y el PTS, en función de razones de aparato, se pusieron de espaldas a uno de los pocos sectores de trabajadores que se lanzó a una lucha política en la CTA: la directiva del SUTNA San Fernando-FATE.

Mucho se habló sobre el método en su momento y también en la citada reunión del 11 de enero; lo cierto es que el compañero que encabezó la lista, Jorge Ayala, fue votado por una  asamblea en la fábrica de 500 compañeros. Pero como ya lo hemos dicho, criminalmente, el PO y el PTS se pusieron de espaldas a esa realidad en función de un supuesto cálculo de inserción y votos que luego no se verificaron en los hechos. En definitiva ambos partidos terminaron presentando listas propias. Caso contrario fue la experiencia de la Lista 5 Frente Clasista, que fue la única lista clasista de frente único, que no está de más recordarlo, hizo una campaña militante y muy buena elección dentro de las fuerzas relativamente limitadas; recordemos los millones invertidos en la campaña por las burocracias de Yasky y Michelli.

Por nuestra parte estamos a favor de un frente de la oposición para las elecciones de ATE, y es evidente que para el conjunto del activismo no es lo mismo que el clasismo vaya unificado a que lo haga cada uno por su cuenta. La intervención en las elecciones de ATE tiene que ser política, empezando por una gran campaña de denuncia a la burocracia sindical que año tras año entrega las luchas de los estatales en función de sus propios intereses. El reagrupamiento tiene que ser bajo una política de independencia de clase. Es decir: no alcanza con un frente anti-burocrático, tiene que ser clasista. Hay que delimitarse de la burocracia entregadora de la Verde, ¡basta de llamarlos la dirigencia! ¡las cosas por su nombre!, y del Gobierno. No hay que hacer un mero sindicalismo que no conduce a los trabajadores a ningún lugar. Nuestra concepción, como organización revolucionaria, es que la vanguardia obrera se eleve a un plano político. Es decir, a la comprensión de los problemas más generales de la clase trabajadora y sus tareas políticas estratégicas, y hoy se pone sobre la mesa salir a disputar políticamente al conjunto de los trabajadores estatales enfrentando a todas las variantes de la burocracia sindical.