Socialismo o Barbarie, periódico Nº 165, 04/12/09
 

 

 

 

 

 

20 de Diciembre

Por un gran acto clasista en Plaza de Mayo

Este aniversario del 20 de diciembre se realizará en un momento muy especial. No tendrá el carácter “ritual” en el que podía haber caído en años anteriores cuando el proceso de la lucha y la recomposición de la vanguardia obrera era menos visible.

El hecho es que hoy por hoy en el contexto de una coyuntura muy contradictoria, lo que se está viviendo a partir de la pelea de Kraft, el Subterráneo de Bs. As., de la disputa con Wasiejko en el neumático, de la lucha de sectores de docentes, estatales, salud en diversas provincias, etc., es una circunstancia de desborde por izquierda al gobierno K y de paso al frente de la lucha de sectores de los más importantes de la vanguardia obrera argentina.

Está claro que no se trata de un ascenso de conjunto. En este aspecto sigue funcionando la traba que significan las burocracias de la CGT y la CTA. Pero los últimos meses han estado teñidos por la enorme preocupación de la burocracia sindical, las patronales y el gobierno por el peso que está adquiriendo la izquierda independiente en porciones de la clase trabajadora.

Es más: cuando una discusión como la del modelo sindical pasa a ser un debate nacional esto no puede ser más que un claro indicativo de que por abajo la cosa está pasando a castaño oscuro. Insistimos: que el tema de la organización del movimiento obrero se transforme en un tema nacional, no puede estar indicando otra cosa que la propia recomposición de sectores de los trabajadores –a pesar de todos los intentos del gobierno K– está ganando en calidad, extensión y profundidad.

Sencillamente entonces, este 20 de diciembre tenemos que hacer un actazo clasista. Tenemos que levantar una tribuna donde la vanguardia independiente y la izquierda partidaria lancen su desafío a la CGT y la CTA de que profundizaremos nuestro esfuerzo por un nuevo movimiento obrero, independiente, clasista y revolucionario que aspire a reorganizar de abajo a arriba las filas de la clase obrera en nuestro país. Tenemos que levantar una tribuna que esté al servicio de los compañeros del cuerpo de delegados del subte, de la nueva interna de Kraft, de la lista Marrón del SUTNA, de la comisión interna del diario Crónica en plena lucha, de los dirigentes de los ex SUTEBA combativos.

Desde el Nuevo MAS –en plena realización de nuestro congreso– nos jugaremos con todo a un acto que como nunca seguramente será seguido por todos los medios, que intentarán contarle las costillas a la izquierda en el movimiento obrero. Por esta razón todas las corrientes debemos hacer los máximos esfuerzos por facilitar la asistencia de las delegaciones más representativas y masivas que sea posible.