Murió Ernesto González

El pasado lunes 16/07, en su localidad natal, Pehuajó (Provincia de Buenos Aires), murió Ernesto González. Atrás quedaron prácticamente 50 años de vida militante y trotskista. Como es conocido, González fue uno de los dirigentes históricos de la corriente morenista, y atravesó junto con ella, sus momentos de apogeo, pero también el duro estallido y tremenda decadencia. Tomando esta trayectoria en su conjunto, hay que rescatar la dedicación de toda una vida a la puesta en pie de una de las corrientes más vitales del movimiento trotskista latinoamericano y mundial en la segunda mitad del siglo XX.

Al mismo tiempo, claro está que no podemos dejar de señalar que el proceso de estallido del viejo MAS y la vieja LIT, encontró a González aferrado a una cerrada negativa de sacar balance objetivo alguno de las razones de este retroceso. En el fondo, esta fue siempre la crítica central que desde el Nuevo MAS formulamos a sus posiciones. Es decir, un acendrado “conservadurismo” que cada vez más se iba transformando en un callejón sin salida.

Lo demás es –en este marco– “anecdótico” y no nos interesa volver sobre ello aquí. Solo marcar la desproporción de que en un único reportaje –concedido por el diario Página 12– en oportunidad de la reciente campaña electoral de la Capital (donde González fue candidato a primer legislador por la lista de Izquierda Socialista), haya dedicado la casi totalidad del mismo a atacar a nuestra organización. Preferimos destacar, en todo caso, el valor que tiene –objetivamente y más allá de otras consideraciones políticas– el que Ernesto González haya dedicado toda su vida –con aciertos, errores y horrores– a la causa del movimiento trotskista. (R. S.)