Córdoba

“Memoria” K vs. lucha independiente

Por Adrián Peryam

En el principal acto por el 24 de marzo en el interior, la presencia de Kirchner en Córdoba puso bien en claro el dilema que atraviesa el movimiento democrático y de derechos humanos: sumarse a la demagogia oficialista con argumentos “unitarios” que encubren una lavada de cara a la política del gobierno o mantenerse independientes del poder de turno y del Estado, con o sin disfraz “progresista”.

Con Kirchner entregando el predio donde funcionó el principal centro de detención de la dictadura en el interior del país, La Perla, este 24 de marzo fue particular.

Los días previos al aniversario del golpe fueron vividos intensamente, puesto que todo estaba preparado para que el sábado se entregara el predio. El sentimentalismo y los testimonios de los sobrevivientes eran lo que reflejaba la prensa para hacer de esta entrega algo emotivo y de esta forma colaborar con la política de derechos humanos del gobierno.

Ya en las semanas anteriores el tema del 24 se fue instalando a partir de la detención de 7 integrantes de grupos de tareas del famoso D2 (centro de detención en  ubicado en pleno centro de la ciudad), y junto con esto la conversión de este lugar en un espacio para recuperar la memoria.

Para Julio López y el esclarecimiento del caso Gerez hubo muy pocas palabras; apenas la demagógica mención en el discurso de Kirchner, y también fue tomado por algún otro discurso dentro del acto de entrega. Nada más. Todo era emotivo, todo era recordar y nada más; a eso quieren llevar el 24 de marzo.

Al mismo tiempo, quedaron claramente demostradas en las calles las diferencias entre los organismos de Derechos Humanos y la izquierda en la provincia. Estas diferencias políticas están basadas, fundamentalmente, en la ubicación que se tiene frente a la política de derechos humanos que lleva adelante Kirchner.

El 23: una marcha, pero con dos actos

Ante la desaparición de Julio López, en la provincia se intenta conformar una multisectorial con todos los sectores posibles, multisectorial que tuvo su pico de participación de sectores en el momento del todavía no esclarecido secuestro de Luis Gerez.

Esta multisectorial se fue rompiendo en la medida en que las Abuelas, los Familiares de Detenidos-Desaparecidos y otros sectores tradicionales hicieron un balance crítico de una marcha por la aparición con vida de Julio López. La conclusión que sacaron los organismos sobre el acto (en el cual cada partido o grupo leyó una adhesión) fue que hubo partidos que “fueron demasiados duros con el gobierno”. Esto provocó una ruptura: desde esa reunión a esta parte nunca pudimos hacer una acción en común con estos sectores.

Para este 24, con la llegada de Kirchner y todos los que quieren llegar a gobernador o posicionarse electoralmente buscaron quedar cerca del presidente: Juez, De la Sota, Schiaretti; todos querían estar  allí.

HIJOS, el sector más oficialista de los que se nuclean en el espacio llamado “Mesa de Trabajo”,  fue quien se encargó de allanarle el camino a Kirchner en la semana previa al acto. HIJOS pedía que  “no se politice la entrega de La Perla”. Este “apoliticismo” era funcional a la política del kirchnerismo, que estuvo toda la semana preocupado por los chiflidos que podía recibir como rebote de la interna entre De la Sota y Juez. Sensible como está el gobierno a la imagen del presidente, tener a De la Sota al lado le significaba un problema.

Distintos sectores de los que participaron en el acto de La Perla el sábado al mediodía chiflarían a De la Sota por seguir la línea fascistoide del “algo habrán hecho” o “los padres no se preocuparon”. Entonces, preventivamente, el gobernador “anticipó” un viaje de negocios y quien estuvo en un palco de costado, junto a Juez y otros funcionarios que no se querían perder el evento (ni las oportunidades que se les pueden abrir simplemente por aparecer cerca de K) fue el candidato a gobernador por el delasotismo, Schiaretti.

Por todo esto, la izquierda en este acto se vio impedida de hacer un acto en común con los organismos de Derechos Humanos.

Una acción independiente del gobierno de Kirchner, una marcha que exigiera la aparición con vida de Julio López, el esclarecimiento del caso Gerez, la libertad de los presos de Las Heras, la libertad de los presos de Corral de Bustos, el procesamiento a Isabel Perón y demás responsables de la Triple A, y la cárcel efectiva a los genocidas, entre otras cosas, no podía ir de la mano con un acto que terminaba con una vigilia para ir al circo montado por el gobierno y en el cual todos los funcionarios provinciales especulaban cómo posicionarse. En ese espacio no se podía leer un documento criticando al gobierno. La multisectorial decidió, marchar en forma diferenciada y terminar con la lectura del documento, dos cuadras antes de la plaza en el que se desarrollaba el otro acto.

MST: frente único con el gobierno, no con la izquierda

En esa multisectorial concordamos: MAS; PO, PTS; IS, PCR y algunos sectores independientes. En las primeras reuniones estuvo también el MST, que luego desistió de seguir participando ya que no coincidían con la política general que se estaba llevando adelante. Sostenían que toda la política llevada adelante por la multisectorial estaba equivocada, que el afiche con el lema “los derechos humanos no serán pieza de museo” estaba mal, que el documento separaba más de lo que juntaba y todo lo que se hablaba en las reuniones para el MST era rupturista y no servía para dar una batalla política a la Mesa de Trabajo, ni servía para tratar de llevar a la izquierda a los “sectores de masas” independientes que estos organismos llevan a las marchas.

Por todo esto se iban retirando del espacio, igualmente querían marchar con la Multisectorial, pero para después retirarse e ir al otro acto para ir a dar la batalla allí, cosa que terminaría rompiendo la columna de la multisectorial. 

Finalmente, el MST marchó en la columna de los organismos, en forma diferenciada pero sin hacer acto propio, por detrás de los organismos y por delante de la multisectorial. En esa columna estaban HIJOS; Abuelas, Detenidos desaparecidos, UCR, PC, CEPA, el juecismo, el PS, el PH y Libres del Sur entre otros.

Marcha el 23, escrache el 24

La marcha del viernes fue muy importante: unas 20.000 personas marchamos por las calles de Córdoba capital el viernes por la noche, con un fuerte contenido juvenil que se manifestó con la presencia de varios centros de estudiantes de escuelas secundarias. En la columna de la multisectorial participaron unas 5.000 personas. Cabe mencionar que en el interior de esta columna no sólo estábamos los partidos de izquierda, sino también compañeros independientes como los del espacio por la Recuperación del agua e indymedia. En muchos sectores se cruzó la polémica acerca de cuál era el acto al que había que ir, lo que ayudó también a instalar la polémica acerca de la política K.

No se trataba de ir a dar simplemente la discusión de por qué no ir a La Perla, sino de reflejar la crítica concreta y real a la utilización que este gobierno quiere hacer de los derechos humanos, y no simplemente ir a mostrarse al lugar en el que hay más gente. Así se empezó a poner de pie una movilización independiente del gobierno de Kirchner.

El sábado 24, mientras Kirchner hacía su acto en La Perla (y no “entrega”, ya que en realidad el predio se entregará dentro de unos meses) y bajo una copiosa lluvia, unas 300 personas de las organizaciones que integramos la multisectorial (MAS; UNHIDOS; PO; PTS; PCR; IS; MTR) escrachábamos la casa de Menéndez. El acto fue realizado como una medida efectiva contra el mayor genocida de la provincia y responsable de más de 83 asesinatos.