Semana de lucha del nuevo MAS contra la impunidad

En varios puntos del país, a lo largo de la semana del 17 al 24 de marzo, nuestro partido desarrolló una intensa actividad con los ejes de la aparición con vida de López, el castigo a los asesinos de la Triple A y la continuidad de la lucha contra la impunidad de los asesinos del proceso.
En este marco, impulsamos la necesidad de que las movilizaciones a realizarse el 24 no debían ceder en poner sobre la mesa la responsabilidad política del gobierno de Néstor Kirchner en la continuidad de la desaparición de López, así como la denuncia del operativo de limitación y captación que lleva adelante K en el terreno de los derechos humanos.
No fue casual entonces que el gobierno haya dado explícita orden a los medios de comunicación masiva que en las semanas previas no se hablase una palabra del 24 (en marcada diferencia con el año pasado), y que toda su apuesta haya estado en la política de hacer del 24 un feriado despolitizado, donde a lo sumo la población viera su acto mediático en La Perla, que fue difundido hasta el hartazgo por la TV prácticamente en cadena nacional. En estas condiciones, sobre la multitudinaria movilización que realizamos por la tarde en Plaza de Mayo y que le ganó por varios cuerpos a la oficialista realizada más temprano, actuó un cerco mediático evidente para evitar todo lo posible que trascendiera. Así lucha K por los derechos humanos.
En estas páginas reflejaremos entonces parte de esta actividad y nuestras conclusiones políticas. Nos apresuramos a subrayar que está pendiente la realización -en las próximas semanas– de una masiva movilización a la Cámara Federal para que los crímenes de la Triple A sean declarados de lesa humanidad. Esto, que hasta ahora no ha ocurrido, lo que pone en serio riesgo la causa reabierta por Oyarbide, fue un grave déficit del propio documento de Memoria, Verdad y Justicia en el cual la importantísima cuestión de la necesidad de la lucha contra los asesinatos de la vanguardia obrera bajo Perón e Isabel apenas si recibieron mención, por lo que lamentablemente tuvimos que dar esa batalla prácticamente en soledad las semanas previas a la marcha.

Crónica del domingo 18 en Plaza de Mayo

Jornada político-cultural
a 6 meses de la desaparición de López

El pasado domingo 18 se cumplieron seis meses de la desaparición de Jorge Julio López. En este marco, y como preparación de la gran marcha del 24 de marzo, se realizó en Plaza de Mayo una Jornada político-cultural en la cual el nuevo MAS, la juventud del Ya Basta! y la agrupación de mujeres Las Rojas realizaron distintas actividades.

Los seis meses de la desaparición de López marcan la evidente responsabilidad del gobierno, que en todo este tiempo no llevó a cabo ninguna investigación seria. Y para colmo, en los primeros tiempos de la desaparición de López, hizo correr la vergonzosa versión –a través de dirigentes derechos humanos cooptados por el gobierno, como Hebe de Bonafini– que “López se había escondido por su propia voluntad”. La víctima fue convertida en victimario.

Antes del mediodía del domingo 18, ya estaban abiertos los puestos de la exposición organizada por el MAS. Fue dedicada a rescatar la memoria del PST (predecesor del nuevo MAS en los años 70) y las luchas del movimiento obrero y juvenil en esos años. Y, también a recordar la respuesta del gobierno de Perón-Isabel, de la burguesía y la burocracia sindical al inmenso ascenso obrero y popular iniciado en 1969 con el Cordobazo, que fue, en primera instancia, la organización de la Triple A, que asesinó a centenares de luchadores, entre ellos a 15 compañeros del Partido Socialista de los Trabajadores. Los militares vinieron luego a coronar esto con un genocidio masivo.

La iniciación de la causa judicial por la Triple A (en la que el MAS se ha presentado como querellante), han puesto de rigurosa actualidad estos hechos, que se pretendieron ocultar en una “historia oficial”, según la cual la represión y los asesinatos habrían comenzado sólo después del 24 de marzo de 1976.

Desde la mañana y durante toda la tarde desfilaron por la muestra numerosos compañeros, especialmente jóvenes. Allí la gran mayoría comenzó a enterarse de una historia muy distinta de la que se cuenta “oficialmente”, y no sólo desde la derecha. Una historia que tiene como uno de sus principales mitos el de poner a las organizaciones guerrilleras como la única expresión de combate político, pretendiendo ignorar la inmensidad de las luchas obreras, estudiantiles y de masas, y desconocer a las organizaciones como el PST, que actuaban íntimamente ligadas a ellas.

Las actividades de la Jornada político-cultural no se limitaron a esta muestra. Un puesto de la librería Gallo Rojo y de Editorial Antídoto fue uno de los lugares más visitados. Se pintó un mural durante la jornada y un muñeco singular (que puede verse en las fotos) desfiló por la tarde.

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