Socialismo o Barbarie, periódico, Nº 99, 29/03/07
 

 

 

 

 

 

Santa Cruz: lucha de los trabajadores y crisis política

Se va a acabar la dictadura provincial

Docentes del MAS
Río Gallegos, 26 de marzo de 2007

El gobierno provincial a cargo de Carlos Sancho[1] desplegó todo su arsenal de maniobras siniestras para desacreditar, amedrentar y dividir a los trabajadores de Santa Cruz. En esta tarea no estuvo solo; fueron cómplices los medios de “des-comunicación” estatales y privados, donde sólo se transmitía el discurso oficial y se censuró a los programas que hacían mención al conflicto docente. Tal fue el caso del programa infantil “La ronda”, que se transmite por LU 14, radio estatal. La censura fue efectuada en el acto, la conductora nunca volvió al aire después del corte. De la misma radio es el corresponsal de medios radiales de Córdoba que  fue despedido por sus informes sobre el número de manifestantes.

Es importante dejar en claro algo; el detonante de este conflicto social fueron los trabajadores docentes. Pero después de un  mes de conflicto, con paro escalonado de más del 90% de acatamiento y habiendo arrastrado, con la masividad del reclamo, a otros sectores de estatales, el contenido de la lucha ya no sólo es salarial: tiene un contenido político.

Los docentes y estatales le dijeron ¡Basta! a la política salarial del gobierno, implementada hace 16 años a fuerza de cooptación y con formas coercitivas, como el nefasto presentismo; una clara medida anti huelga, que descuenta una porción fija del sueldo con sólo llegar tarde, que inclusive castigaba a las compañeras que tienen hijos, ya que durante la licencia de maternidad no se cobraba.

El salario de los empleados públicos está compuesto en un 70% por sumas en negro. En el caso de un docente, el básico es de sólo $161. Un municipal categoría 10 cobra de básico $58, y un empleado de la administración sólo $70. Esto genera un vaciamiento de la caja de servicios sociales, así como de la jubilación, pero también se siente cada seis meses: si un docente gana mil pesos de bolsillo, su aguinaldo alcanza apenas los 200 pesos.

Con estos magros salarios y con los precios por las nubes, no es de extrañar que la mayoría se sature de horas para llegar a fin de mes, lo cual atenta contra la calidad educativa.

Las condiciones  de trabajo son deplorables, no se respeta la profesionalidad del educador[2], los edificios se caen a pedazos. Consecuencia de esto es que la provincia tenga uno de los más bajos niveles educativos, con una deserción altísima y mucha repitencia. Es importante recordar que la reforma educativa la implementó el actual ministro de Transporte de la Nación Ricardo Jaime, investigado por el escándalo de las narco valijas. En este sentido la provincia fue precursora en las reformas destructivas del sistema educativo.

Conflicto, provocaciones y marchas masivas

Una vez comenzado el conflicto, el gobierno intentó apretar  a distintos sectores, a directivos que adherían al paro, estatales movilizados, pintaron las escuelas con la leyenda  “ADOSAC = P. Obrero”[3], rompieron los vidrios de la filial de ADOSAC en Gallegos y en el interior, quemaron el auto del gremio[4] y finalmente intentaron armar una contramarcha a partir de un grupo de “padres autoconvocados”, encabezados por el vocal de los padres en el Consejo de Educación, Osvaldo Polo para el 15 de Marzo, coincidiendo con la marcha docente, una clara provocación.

La convocatoria, fogoneada por todos los medios junto a pautas oficiales que mostraban lo mucho que ganan los docentes, bombardeó a los habitantes de Santa Cruz desde sus televisores.

Y aun más, se obligó a los trabajadores de la construcción, específicamente a los de las empresas de Lázaro Báez[5], a asistir a la contramarcha, bajo amenaza de despido. Aún así, no tuvieron éxito: la convocatoria oficial se desgranó a medida que intentaba marchar, algunos los insultaban al pasar, la mayoría se iba de a poquito, luego de haber dado el presente a los capataces y punteros. Juntaron apenas 700 personas.

Esa mañana, el ministro de Economía, Juan Bontempo, y el de Gobierno, Daniel Barrista, se habían reunido con los dirigentes obsecuentes de los gremios viales, servicios públicos y UPCN para arreglar un mísero 15% en negro. Evidentemente, la mayoría lo consideró insuficiente.

En contraposición, los docentes, junto a ATE provincial, judiciales, empleados públicos sin representación sindical (decreto 591), municipales de Río Gallegos, legislativos, jubilados de distintos entes, estudiantes, se concentraron en otro punto de la ciudad y marcharon a la Casa de Gobierno. Sumaban unas 5.000 personas, en total una marcha de 8 cuadras.

La gente gritaba con bronca, fue como si se sacaran el miedo, en las calles los transeúntes saludaban de los edificios, tocaban bocinas. La marcha llegó al Consejo de Educación y se entregó un petitorio que fue recibido por la ventana lateral. Una hora antes,  en el mismo lugar, con cámaras, la titular del Consejo de Educación, Silvia Esteban, se había mostrado preocupada por los derechos humanos de “nuestros hijos”.

Los cantos apuntaban a Kirchner, responsabilizándolo de la política provincial; se repudió también a los distintos funcionarios títeres que con sus declaraciones sólo encendieron la bronca. Finalmente la marcha se dirigió a la casa personal de Kirchner, que no se encontraba presente; la gente cantó y gritó. En total la marcha duró casi tres horas y se desconcentró en tranquilidad.

Para el día siguiente, todos esperaban el anuncio de un supuesto aumento, renuncias, algunos especulaban que Kirchner venía a arreglar todo. En cambio, se enteraron de que habían quemado el auto del gremio y la ciudad estaba infestada de gendarmes y policías.

El sábado se realizó una asamblea de 600 docentes y se ratificó el paro por 72 horas. ATE y Judiciales anunciaron paro por 24 horas y marcha conjunta provincial el miércoles 21 de marzo.

Ese día confluimos con los otros gremios en Roca y San Martín. La marcha sumó unas 10.000 personas, más de 10 cuadras de trabajadores de distintos gremios y localidades.

Previo a la manifestación en la ruta había varios controles policiales donde se interrogaba a los docentes y hubo inclusive un corte de ruta espontáneo, cuando coincidieron varios grupos de docentes demorados por la policía.

La marcha no pudo llegar a Casa de Gobierno ni a la casa de Kirchner, ya que un nutrido grupo de gendarmes y policías impidió el paso. La marcha los rodeó y siguió su recorrido, sin caer en provocaciones.

Entre los oradores hubo docentes, estatales y estudiantes secundarios, se incluyó al obispo de Santa Cruz, que acusó al gobierno de intransigencia por no querer negociar.

Esto fue muy mal visto desde el gobierno, que minimizó la protesta en declaraciones a Télam, que informó burdamente que sólo había 1.500 personas.

Luego del 21 el gobierno unificó el discurso, acusando a los docentes de ganar los sueldos más altos del país, y desde un acto en La Matanza el mismo K, exaltado gritaba que no se iba a dejar extorsionar, acusó al cura y a todos los opositores, especialmente a Eduardo Arnold, un arrepentido (vicegobernador) que de forma oportunista se quiere subir al carro de la lucha.

Es importante destacar que muchos tenían expectativas en que la contundencia de las marchas iba a hacer aflojar al gobierno. Esta visión deja de lado que el conflicto se debe extender en otros sectores, y en eso el aparato de presión de gobierno aún no fue derrotado. La lucha por el aumento al básico pone en cuestionamiento la política salarial de 16 años en una provincia donde casi el 40 % de la población activa depende directamente del Estado provincial. En este sentido, es importante destacar que los docentes están peleando no sólo por sus salarios, sino que en su lucha se reflejan los otros sectores estatales. El gobierno es consciente de esto y por eso la intransigencia en su discurso.

Cómo sigue

Para esta semana está planificada una sentada el martes 27 y una movilización de conjunto con los otros gremios el jueves 29. El paro, por 72 horas, se cumple con alto acatamiento en toda la provincia, y en cada localidad se llevarán a cabo marchas y otras actividades para el fondo de huelga.

Es importante que los docentes tomemos conciencia que si no garantizamos,  masificamos y extendemos la lucha comprometiendo a otros sectores, el gobierno nos va a aislar y eventualmente desgastar. Ya anunció que va a descontar los días de huelga, y esto puede tener un efecto negativo.

No sólo se debe presionar a los gremios por arriba: es necesario llegar a los otros sectores con volantes o charlas para que las bases presionen a sus dirigentes, porque la lucha por el aumento al básico es de todos los empleados estatales, no solamente de los docentes.

SI GANAMOS LOS DOCENTES GANAN TODOS, por eso el gobierno va a recurrir a todos los métodos posibles para derrotarnos.


[1] Sancho gobierna desde hace un año luego de la renuncia de Sergio Acevedo, tras lo acontecido en la localidad de Las Heras, zona norte de la provincia.

[2] Hubo casos de acomodos avalados por funcionarios, donde se le sugería al docente revisar las notas.

[3] Durante los sucesos de Las Heras aparecieron pintadas acusando al PO-FUT de asesinos de policías.

[4] Medios independientes denunciaron una zona liberada horas antes del atentado: la luz se cortó y según testigos gente de negro rompió el vidrio del móvil y le tiró una molotov. Los docentes llamaron al 101 pero tardaron 30 minutos pese a haber una comisaría a 3 cuadras. En ese momento, grupos de gendarmes custodiaban la casa del “Lupo” y decenas de policías en las calles y los barrios cumplían la tarea de amedrentar. Según La opinión austral, esa noche labraron ¡400 multas por infracciones!

[5] Acusado por la revista Noticias de ser testaferro de Kirchner. El ejemplar en que aparecía esa nota nunca llegó a los kioscos locales.