Compañeras y compañeros:

Aunque este año no tenga la alegría de estar entre ustedes, nuestra causa y fraternidad común hace que más de 10.000 kilómetros de distancia no me impidan palpitar con ustedes la apertura y las discusiones de este Congreso, vivir esa euforia militante que se va a respirar durante tres días en el Bauen.

La clase dominante actual lleva a la humanidad hacia la catástrofe. Crisis económica, crisis de los refugiados, desastres climáticos, recrudecimiento de violencia hacia las mujeres y las minorías, reforzamiento de los aparatos represivos y de las tendencias militaristas a nivel mundial. Yendo a volantear a un hospital de 11.000 trabajadores con estudiantes de la facultad, me veo obligado a dar media vuelta porque ya en el subte un yuta de civil nos saca fotos para ficharnos y amedrentarnos. Yo, para el Estado imperialista francés soy ciudadano de segunda, sudaca, y dependo de poder renovar un maldito “permiso de residencia” porque sino en tres meses paso a ser una “persona ilegal”: no puedo exponerme fácilmente a su bota represiva. Volviendo a la facultad, leo en los diarios que cerca de 500 migrantes murieron cruzando el Mediterráneo, en esa tierra de nadie donde los explotados y oprimidos del mundo mueren entre la carnicería imperialista de Medio Oriente y los muros y alambrados de la “Europa fortaleza”. Mastico rabia y más rabia y sueño con el día en que tengamos nuestra revancha…

Pero vivimos un momento que nos da la oportunidad de empezar a tener nuestra revancha, acá y ahora. Porque aunque yo no pueda volantear frente a 11.000 trabajadores de hospitales, el lunes una centena de estudiantes y gente de Nuit Debout, el “movimiento de plazas” fue a volantear a Renault Guyancourt, fábrica automovilística de más de 10.0000 trabajadores, para denunciar la dictadura patronal y preparar la huelga general del 28 de Abril. Porque aunque los gobiernos imperialistas europeos conviertan el Mediterráneo en un gran cementerio, hoy una centena de militantes de Nuit Debout ocuparon una escuela secundaria abandonada para alojar refugiados en situación de calle. Porque en la ciudad de Rennes, el Sindicato de Empleados de Correos llama a movilizarse el 28 de Abril utilizando cascos de moto porque “no vamos a dejarnos golpear por la Gendarmería alegremente”. Porque en cada vez más cabezas y más bocas está la idea de la huelga general ilimitada, de hacer del 28 de Abril el puntapié de una pelea en serio, contra la podrida reforma laboral del gobierno francés y contra el mundo de opresión que representa. Porque cada vez más gente ya no soporta esta sociedad inmunda y sólo sueña con una cosa: con tirarla abajo.

Quisieron hacer de nosotros la generación sin trabajo, sin salud, sin educación, sin casa, sin futuro. Pero los miles de estudiantes y trabajadores que se movilizan en Francia, los secundarios que ocuparon sus escuelas en Brasil, los trabajadores agrícolas de Costa Rica que luchan por trabajo digno, las cientos de miles del NiUnaMenos en Argentina y en España; las huelgas, ocupaciones de fábricas, de ministerios, movilizaciones, contra el ajuste de Macri; les demostramos que no va a ser tan fácil. Les contestamos que vamos a ser la generación sin miedo, sin cadenas; vamos a ser la generación revolución.

El partido está ante la posibilidad histórica de un salto constructivo. Después de años de pelearla en minoría, de no bajar los brazos ni las banderas, de esforzarnos por retomar lo mejor del marxismo revolucionario, por pensar, elaborar, por pelear una política que parta de las necesidades de nuestra clase y no de necesidades de secta o mini-aparato, llegó el momento de pasar por caja. Nadie lo va a hacer por nosotros: llegó el momento de dar un paso adelante, de ir a la ofensiva, de cobrar todos nuestros aciertos, de que una nueva camada de compañeros den un paso adelante, un salto, y tomen la decisión de vivir la única vida que vale la pena ser vivida: la vida que se consagra enteramente a la lucha por la liberación  de los explotados y oprimidos.

Las perspectivas de construcción de la Corriente Internacional Socialismo o Barbarie están íntimamente ligadas a la construcción del partido. El puñado de compañeros de la Corriente a nivel internacional militamos por encima de nuestras fuerzas para construirnos, lo seguiremos haciendo, pero necesitamos de ustedes. Necesitamos de la política, la elaboración, la fuerza y la moral del partido. El partido también necesita a la corriente: el provincialismo, el nacional-trotskismo, la estrechez de miras son el peor cáncer del marxismo revolucionario; por eso los combatimos desde nuestra fundación y consagramos esfuerzos enormes a la construcción internacional. La fibra internacionalista es parte de nuestro ADN como partido y corriente: no tengo dudas de que va a seguir desarrollándose y profundizándose.

Les deseo éxitos en sus discusiones y resoluciones del Congreso, compañeros. Si el capitalismo mundial va hacia la crisis y la descomposición, no va a caer por su propio peso: corresponde a los explotados y oprimidos derribarlo. Más que nunca, se plantea una disyuntiva feroz: Socialismo o Barbarie. Me llena de orgullo y de fuerza militar con compañeros que dejan cuerpo y alma en la lucha revolucionaria, con los cientos de nuevos militantes que ni conozco ni me conocen personalmente, pero que siento como hermanos de toda la vida.

¡Viva la lucha de los trabajadores,  de los explotados y oprimidos del mundo entero!

¡Viva el internacionalismo revolucionario!

¡Viva la Corriente Internacional Socialismo o Barbarie!

¡Viva el Nuevo MAS!

Desde París, ¡un gran abrazo internacionalista!

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