Socialismo o Barbarie, periódico Nº 204, 28/06/11

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El “progresismo” K en la bancarrota

Rachid, Morgado y el INADI:
los efectos de la cooptación política

Por César Rojas
Agrupación de Minorías Sexuales
Carne Clasista
carneclasista@yahoo.com.ar

El escándalo en el INADI empezó con episodios de violencia, acusaciones mutuas, la intervención de la Policía y siguió con la remoción de María Rachid y Claudio Morgado, y la intervención del organismo por parte del Gobierno Nacional. Ahora la guerra en el Instituto Nacional contra la Discriminación amenaza continuar con sendas presentaciones ante la Justicia. Más allá de las internas políticas a las que Rachid y Morgado responden dentro del PJ (conocidos son sus alineamientos con Aníbal Fernández una, y otro con Alberto Fernández), con este nuevo escándalo se demuestra cómo el kirchnerismo ha venido operando por cooptación de figuras del activismo de la diversidad sexual y vuelve a poner sobre el tapete el problema de perder la independencia política con el consabido desbarranque político y moral.

Cooptación o independencia política

La rebelión popular de diciembre de 2001 vino a traer cuestionamientos desde abajo hacia  todo el régimen burgués, sus instituciones, a todo su personal político y su representatividad y sus métodos. Esto se resumió en la consigna popular “que se vayan todos, que no quede ni uno solo”. La comunidad gay-lésbico-trans y sus organizaciones no quedaron ajenas a estos cuestionamientos, en particular el sector histórico al que se llamaba “la burocracia rosa”. Desde las nuevas agrupaciones gay-lésbicas-trans que surgimos luego del 2001, entre las que se encontraba Carne Clasista, señalamos en muchas oportunidades la importancia de conservar la independencia política del gobierno, del Estado y sus instituciones, y de los partidos patronales. En ese sentido, aunque reconocíamos sus trayectorias, fuimos siempre críticos de la “representatividad” y de los métodos burocráticos de ejercerla de las organizaciones históricas  como La Fulana (que dirigía Rachid) o de la CHA (Comunidad Homosexual Argentina). Pero del mismo modo que con el movimiento de trabajadores desocupados o con los organismos de derechos humanos, el kirchnerismo se jugó a cooptar agrupaciones y figuras del activismo de la diversidad sexual alrededor de la creación de la Federación LGBT (que presidió Rachid). Para esto se apoyó también en el INADI a fin de llevar al movimiento LGBT  bajo la órbita de su política y a la confianza en el “lobby” parlamentario para obtener sus reivindicaciones que impulsaban los autoproclamados “representantes” del movimiento. De esta manera todos aquellos partidos y figuras políticas que estaban cuestionados y a quienes el pueblo en las calles en 2001 les gritaba “que se vayan todos” se quedaron, y las reivindicaciones históricas de la diversidad sexual y los derechos humanos sirvieron para lavarles la cara con algo de “progresismo” a los figurones de siempre y al proyecto capitalista y pro-patronal de los Kirchner. Lamentablemente con el paso de los años, siguieron acumulándose las corruptelas, los escándalos como el reciente en el INADI o la antidemocrática expulsión de toda el Área de Jóvenes por parte de la cúpula de la CHA [1], al tiempo que se profundiza el vaciamiento y la desmovilización del movimiento LGBT.

Sigamos en las calles luchando por los derechos de las mujeres y las minorías sexuales con independencia política del gobierno

En un sentido totalmente opuesto elegimos ir otras organizaciones que nos hemos mantenido firmes luchando en las calles de manera independiente, generando alianzas con sectores del movimiento de mujeres y de organizaciones de lucha como Las Rojas y Asambleas del Pueblo, con quienes hoy estamos presentando la Lista 906 en las elecciones de Capital que lleva el derecho al aborto libre, legal, seguro y gratuito como principal bandera. Esta reivindicación quedó planteada luego de la conquista del matrimonio igualitario que fuera obtenido a último momento por la presión de la movilización popular que empujara la votación en el parlamento, donde el kirchnerismo impulsaba una tibia política de “rosca” para ganarse el favor de algunos legisladores. Es decir, que ni siquiera con esta reivindicación democrática elemental que no toca los fundamentos de la familia burguesa, el gobierno fue capaz de jugarse. Tanto es así que hasta la propia Cristina esperó hasta el día antes de la votación para pronunciarse a favor, estando fuera del país y de gira por China. La misma Cristina que está en contra del derecho al aborto y que coincide en “la defensa de la vida” de la Iglesia de los curas abusadores y los militares genocidas. La misma Cristina detrás de la que se encolumna Rachid, en la lista de los impresentables integrada por Filmus, que aspira a continuar con la Policía Metropolitana de Macri, y de Tomada, abogado del burócrata Pedraza, asesino de nuestro compañero Mariano Ferreyra. Luego de lo sucedido con Schoklender y las Madres de Plaza de Mayo, y ahora con el escándalo del INADI, la conclusión es palmaria: o sostenemos la independencia política ligándonos al pueblo trabajador y al conjunto de los explotados y oprimidos, o el desbarranque es inevitable. Por cooptación del Estado burgués o por ser funcionales a algún proyecto patronal con sus consabidos mecanismos de corrupción.

En 2006 fue la creación de la Federación Argentina LGBT a la que muchos activistas de todas las provincias acudieron de buena fe engañados por una supuesta “pluralidad” y “neutralidad política” pero que escucharon azorados en la bienvenida “los saludos del compañero Kirchner” de boca de María José Lubertino (entonces al frente del INADI) [2]. A estos compañeros les dijimos desde un volante en la puerta del recinto que no había que tener ninguna confianza ya que “este Gobierno y este Estado por más que se vista de rosa… patronal y patriarcal queda”. A la luz de las conclusiones después de años de experiencia con el gobierno K, reafirmamos que es tomando la lucha en nuestras manos, con un movimiento que se reivindique independiente y que luche en las calles, es que vamos a conquistar el derecho al aborto, el derecho a  la identidad para las personas trans y el resto de las reivindicaciones para las personas lgbt, y es en ese mismo camino que iremos construyendo las alianzas junto a otros explotados y oprimidos para arribar a una sociedad libre de toda opresión y explotación.


Notas:

1. Ver Indymedia género Abril 2011
http://argentina.indymedia.org/news/2011/03/776650.php.

2. La misma que hoy ante el movimiento de mujeres llamó  a “votar a Filmus” para obtener el aborto.