Socialismo o Barbarie, periódico Nº 185, 16/09/10
 

 

 

 

 

 

La importante lucha en Villa Constitución: Duros como el metal

Por la nacionalización control obrero de Paraná Metal

Corresponsal

Se van a cumplir dos semanas del corte de la autopista Buenos Aires–Rosario por parte de los trabajadores de Paraná Metal y han logrado instalar el conflicto como parte de la agenda política nacional. Este hecho logró que Tomada tome cartas en el asunto, pero las cartas del ministro juegan para el empresario Kristóbal López.

Los compañeros están demostrando una inquebrantable voluntad de lucha. En el piquete está el corazón de la lucha. Las discusiones se procesan ahí.

La solidaridad es impactante, en primer lugar la de Villa Constitución, que unas semanas atrás realizó una marcha de más de 5000 trabajadores y vecinos. El aporte de 100.000 pesos de Acindar, las delegaciones de trabajadores y estudiantes que se acercan al piquete demuestra la simpatía que despierta esta lucha en defensa de las fuentes de trabajo.

Las propuestas de la patronal son un escandaloso chantaje antiobrero (ver reportaje). Todas giran  alrededor de reducir el salario, el personal y de condiciones de trabajo. Las propuestas cambian casi a diario pero el contenido no. Se busca desgastar a los trabajadores y  “algún dibujo” que sea digerible para los obreros.

La campaña electoral de la CTA y el conflicto

Ambos sectores en que la está dividida la CTA tienen su correlato en la UOM Villa Constitución, Mientras Pichinini apoya a Micheli, Paulón ex secretario general de la UOM Villa y con fuerte influencia en Acindar está con Yasky. Micheli anuncia una jornada nacional de lucha para el miércoles 15, mientras el yaskismo, por interpósita persona, en este caso los delegados del subte, saldrán a levantar los  molinetes en solidaridad con Paraná Metal. Mas allá del evidente oportunismo de ambos sectores lo que se impone no son sólo acciones “políticas” sino un paro nacional activo de toda la CTA.

Los trabajadores de Paraná Metal no pueden esperar a que estos dirigentes organicen el plan de lucha y llamen al paro: deben imponérselo y en primer lugar en la UOM Villa. Pero también hay que exigirle a Brunelli y a Caló el paro de UOM San Nicolás y de la UOM nacional que debe empezar por recorridas a Siderar.

¿Cual es la salida para la fábrica?

El gobierno hace un año metió a Kristobal López y le dio jugosos subsidios para que se haga cargo de la planta. Ese plan significó plata fácil de subsidios para los empresarios y suspensiones y ajuste para los obreros. Estamos ante el fracaso de ese tipo de plan, que lo podríamos llamar “buscando patrón”. La salida no puede ser esperar a que venga otro empresario; porque desde el punto de vista capitalista la planta no es productiva en las condiciones actuales de empleo, de condiciones de trabajo y de salario.

La otra propuesta en danza es hacer la funcionar bajo otras formas de “propiedad participada”, léase cooperativas,  etc, pero en realidad estas opciones sólo significan poner a los propios obreros de Paraná metal a hacer el ajuste contra ellos mismos.

La única salida es imponerle al gobierno de Cristina la nacionalización bajo control de sus trabajadores.

Sólo el estado puede asumir los gastos de una inversión y de amortizar pérdidas hasta poner la planta en condiciones productivas. Pero la nacionalización sólo va a venir de la mano de la lucha como hicieron los compañeros del Hospital Francés hace unos años, que consiguieron mantener la totalidad de las Fuentes de trabajo, en las mismas condiciones de trabajo y salario.


Habla Juan de Paraná Metal

“No perder nada!

SoB: ¿Como entró Cristóbal López a Paraná Metal?

J.: Fue por medio del gobierno, se hizo cargo de la empresa hace un año y medio y se lo presentó como un salvataje, pero resulta que ahora tiene la intención de rebajar los salarios y de echar a distintos compañeros…

SoB.: La última ofensiva es echar a todos, y sacarles la “mochila”. ¿nos podes explicar lo de la “mochila”?

J.: Nosotros hace un año y medio entramos bajo la condiciones que ellos nos impusieron como el congelamiento del aumento, la rebaja salarial a través de sacar todos los adicionales que estaban por fuera del convenio de la UOM que se habían conseguido históricamente durante todos estos años y ponerlo en una mochila a un valor congelado. Al año siguiente hubo un aumento del valor hora y esa mochila quedo congelada.

SoB.: Y ahora ¿que medidas se vienen?

J.: En la asamblea primero se decidió que el voto no sea secreto y después nuestra propuesta, que la llevamos al gremio, es la de no perder nada. El gremio dijo que eso se pidió y no lo dan entonces hicimos una contrapropuesta. La contrapropuesta fue que no nos saquen el total del adicional personal, el adicional de la empresa, la mochila, sino un 50%. ¡Estamos resignando un 50% de nuestro adicional por la necesidad que tenemos de  entrar a trabajar! Otro de los puntos del reclamo es que nos paguen estos últimos 45 días. Nos querían dar $1.250 pesos a los de planta y $1.050 a los contratistas y nosotros les pedimos que nos paguen el 60% o mínimo el 50%. La gente esta resignada a perder por la necesidad de entrar a trabajar pero igual hay un debate que se está llevando adelante sobre qué es lo que vamos a hacer. Vamos a continuar con el corte esperando una respuesta y la idea es intensificar las medidas.