Socialismo o Barbarie
 

 

 

 

 

 

Honduras: elecciones presidenciales en noviembre

Surge una alternativa independiente de los dos
partidos burgueses tradicionales

24 de mayo

A cuatro años del asesinato de
Edickson Lemus

El 24 de mayo se cumplieron cuatro años de la muerte del compañero Edickson Roberto Lemus, dirigente de la Central Nacional de Trabajadores del Campo (CNTC) y del PT (actual PST) de Honduras, asesinado en un ómnibus mientras viajaba para apoyar a un grupo de pobladores que estaban siendo desalojados. Aunque hay abundantes datos acerca del autor material, y de los terratenientes y empresarios que ordenaron su muerte, la justicia burguesa de Honduras no ha movido un dedo para castigarlos. Por eso, el reclamo de juicio y castigo a los asesinos de Edickson Lemus es un reclamo permanente en las movilizaciones obreras y populares en Honduras, y que se redobla todos los 24 de mayo.

Después de haber sido en el siglo XX el centro de la producción bananera de Centroamérica, Honduras hoy tiene la principal concentración de obreros de maquila, sometidos a una explotación feroz. Como otras burguesías centroamericanas, la de Honduras ha vivido también de la exportación de carne humana a EEUU: los trabajadores inmigrantes que envían remesas y equilibran así las cuentas nacionales. Pero ahora la crisis está arruinando todo.

Desde hace unos dos años, se vienen produciendo allí las más importantes luchas de la región centroamericana. Grandes movilizaciones y “paros cívicos” paralizaron varias veces el país. En este proceso ha jugado un papel fundamental la Coordinadora Nacional de Resistencia Popular (CNRP), que agrupa a organizaciones obreras, campesinas, magisteriales, estudiantiles y movimientos populares. La CNRP ha sido convocante de los paros cívicos y grandes marchas, especialmente en los períodos en que ha estado bajo la presidencia del compañero Carlos Amaya, del PST de Honduras.

Ahora las elecciones generales ponen a la vanguardia hondureña ante un gran desafío: llevar adelante una lucha también en el terreno electoral, levantando candidaturas independientes de los dos partidos burgueses tradicionales, el Liberal y el Nacional (conservadores).

Casi dos siglos de bipartidismo oligárquico y proimperialista, y un inesperado giro “progresista”

Ambos partidos se han alternado en el poder prácticamente desde la independencia. Pero no sólo han estado al servicio de los explotadores “nacionales: liberales y “nacionalistas” han sido por igual títeres de Washington y las corporaciones norteamericanas.

Pero, en los últimos tiempos, el actual gobierno del liberal Manuel “Mel” Zelaya, se vio obligado a “matizar” esto. Sin romper las cadenas que atan al país al imperialismo –como el TLC con EEUU–, Zelaya se acercó a Chávez, firmó acuerdos comerciales y promovió el ingreso de Honduras al ALBA (Alternativa Bolivariana para las Américas).

Las causas de este “giro a la izquierda” no son difíciles de comprender: la crisis mundial que golpea duramente al país, el debilitamiento del amo de Washington que además no da el menor auxilio a Honduras, las ventajas que ofrece Venezuela como proveedor de hidrocarburos y, por último, la bronca de las masas que alimenta las movilizaciones y “paros cívicos”.

Debate en la vanguardia

Sin embargo, este giro “progresista” ha producido gran confusión en la izquierda y los luchadores. “Hay compañeros que equivocadamente creen que el discurso seudoizquierdista de Mel, constituye el punto de arranque para organizar nuestras fuerzas”, alerta el PST de Honduras, desde su periódico, “El Trabajador”.[1]

“La clase trabajadora hondureña –prosiguen los compañeros del PST–, no puede poner su agenda de lucha en manos de un gobierno patronal que dice ser amigo nuestro para confundirnos y desmovilizarnos. El gobierno igual firma el ALBA que el Tratado de Libre Comercio [con EEUU]. Hoy se pelea con los empresarios, pero a renglón seguido acepta que bajo su gobierno éstos han ganado mucho dinero. Hace unos meses se abrazaba y llegaba a pactos con el gobierno de Chávez y después lo vimos abrazándose y firmando acuerdos con Bush. Lo mismo hace hoy con Obama, a quien presenta como amigo de los países latinoamericanos en momentos en que éste, aliado con las burguesías de todo el mundo, toma medidas para pasarnos la factura de la crisis económica mundial. [...] El gobierno «revolucionario» de Mel Zelaya es el que mandó a reprimir a balazos las movilizaciones de los maestros en el 2006 y el que reprimió a garrotazos el Paro Cívico del 17 de abril del 2008 y, en lo que va del año, reprimió a los compañeros de COPIN y a los estudiantes de San Pedro Sula. [...] Las posturas «progresistas» de Mel son el reflejo de las contradicciones en los sectores dominantes, producto de la misma crisis que su política genera y que no pasan, en las pocas veces que llegan a concretarse, de medidas paliativas, «parches» que no solucionan nada.”

Mantener la total independencia frente a cualquiera de las facciones burguesas

“Dichas contradicciones –concluyen los compañeros del PST–, que a veces ponen al país al borde de verdaderas crisis políticas e institucionales, muestran la falta de alternativas nacionales por parte de las facciones burguesas y sus representantes, abriendo la oportunidad de que la clase trabajadora y los sectores populares organizados irrumpan en la arena política y social con sus propias demandas y propuestas de solución.

“Pero avanzar en la línea anterior sólo será posible a condición de mantener la total independencia de cualquiera de las facciones burguesas, no depositar ninguna confianza política en Mel y su gobierno, profundizar la democracia directa de las bases del movimiento popular en todo el país para contrarrestar los intentos de cooptación de las dirigencias nacionales y mantener y profundizar la organización y movilización unitaria del pueblo trabajador.” (“El Trabajador”, cit.)

Un sector de la CNRP lanza “candidaturas independientes populares”

En esta situación, frente a la elecciones generales de este año, un sector de la Coordinadora Nacional de Resistencia Popular (CNRP), ha lanzado la iniciativa de candidaturas independientes.

Tenemos la oportunidad colosal de dar una gran batalla política para reafirmar nuestra independencia. Se trata del histórico lanzamiento de la Candidatura Independiente Popular a la Presidencia de la República de Carlos H. Reyes, dirigente obrero probado en la lucha popular, quien junto a los designados presidenciales Bertha Cáceres, dirigente de los pueblos indígenas, Carlos Amaya dirigente del PST y de la Asamblea Popular Permanente de El Progreso, así como Lidia Maribel Hernández dirigente COPEMH y del Bloque Popular en San Pedro Sula, son la fórmula presidencial que un importante grupo de organizaciones de la Coordinadora Nacional de Resistencia Popular han lanzado para iniciar la lucha contra el bipartidismo.

“Estos compañeros respaldados por organizaciones del movimiento popular y fuerzas políticas de la izquierda hondureña, impulsan como programa de gobierno la solución a las 12 demandas que la Coordinadora Nacional le ha estado exigiendo a los dos últimos gobiernos desde el 2003. Se trata entonces de exigir políticamente en las urnas lo que pedimos en las calles, tenemos la oportunidad de acompañar las dos tácticas: la gremial y la política como si fueran una sola.” (“El Trabajador”, cit.)

Para la lucha por la independencia política en las próximas elecciones, los compañeros enfrentan una primera y difícil tarea: conseguir 60.000 firmas para legalizar a los candidatos independientes. Esto no va a ser fácil, considerando que los funcionarios y jueces electorales están servicio de los dos partidos tradicionales y de su monopolio bipartidista. Desde aquí les enviamos nuestro aliento para esa batalla.


1.- Edición completa en .pdf, en www.socialismo-o-barbarie.org, actualización del 03/05/09

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