Socialismo o Barbarie, periódico Nº 141, 04/12/08
 

 

 

 

 

 

La legalidad del MAS “Orden Nacional”

Por una campaña democrática de exigencia
de reconocimiento a las minorías

Por Daniel y Leo

Para estar al corriente de la situación de la legalidad partidaria, debemos entender que sigue habiendo gran descreimiento por parte de la población en las instituciones. Sin embargo, ese descreimiento es, hoy por hoy, pasivo y obviamente muy alejado del 2001, razón por la cual el gobierno trata de aprovecharlo para cerrar la crisis de credibilidad por derecha, eliminando a los partidos minoritarios. Esto es así especialmente con los de izquierda, acerca de los cuales saben perfectamente de su existencia y peso real en la vida nacional.

Por esto mismo, el ataque al nuevo MAS, con la eliminación de la legalidad nacional partidaria, lo consideramos un ataque al conjunto de la izquierda, una escalada para intentar dejarla por fuera de la vida política nacional.

Presentamos a continuación, entonces, extractos del recurso presentado, por considerarlo de interés, alertando al mismo tiempo respecto de los evidentes límites de léxico “jurídico” que no puede no tener.

En marzo de este año, la jueza de Primera Instancia, María Servini de Cubría, dicta una sentencia decretando la caducidad de la personaría política del MAS en el Orden Nacional (esta legalidad es la que permite presentar candidatos a presidente y vicepresidente). La argumentación de la sentencia es que el partido no cumpliría con un requisito de la Ley 23.298 (Código Nacional Electoral) que sostiene que es necesario contar con un mínimo de 5 legalidades para ser partido de Orden Nacional. El partido apeló ante la Cámara Nacional Electoral dicha sentencia argumentando que la jueza “confunde” los requisitos para ser reconocido como partido de ON y los requisitos para su mantenimiento como tal.

El pasado 18 noviembre la Cámara Nacional Electoral resuelve la apelación planteada y confirma la sentencia de Primera Instancia, y ordena dar de baja la legalidad partidaria en el Orden Nacional.

Recurso extraordinario

Contra la sentencia dictada por la CNE, el 2 de diciembre se presentó un Recurso Extraordinario, que nos permitiría plantear nuestra posición ante la Corte Suprema (sin creer demasiado en la posibilidad de revertir el fallo). Dicho recurso combinaba argumentaciones jurídicas, políticas e invocaciones a pactos internacionales de Derechos Humanos que fortalecen nuestra posición.

Así en nuestro recurso sostenemos que el fallo de la CNE “le hace decir a la ley de partidos políticos lo que no dice”, obviamente en desmedro de los partidos minoritarios, por lo tanto el Poder Judicial estaría excediéndose de sus funciones e invadiendo funciones del Poder Legislativo. Tal que como sostuvimos en el recurso, “de confirmarse el fallo de marras, basado en argumentaciones dogmáticas e ideológicas, sin siquiera la más mínima y valedera argumentación jurídica, es lisa y llanamente la derogación de la Constitución Nacional, por parte de un juez de la Nacional y la Cámara de Apelaciones”. Asimismo, seguidamente sostuvimos: “La lectura del fallo de marras es: eliminemos a las minorías así la mayoría no tiene oposición”.

A lo largo del fallo sostiene la CNE que “la existencia política concreta de voluntades aisladas no es plausible ni útil, toda vez que es ineficaz para ejercer influencia en la formación de la voluntad del Estado”.

Tal como lo señalamos en el recurso, “la formación de la voluntad del Estado no se determina por el establecimiento de requisitos excesivamente formales y forzados en la interpretación normativa, sino por la pluralidad de opiniones, mayoritarias y minoritarias, encontrándose el Movimiento al Socialismo dentro de estas últimas”.

Y añadimos en el mismo sentido: “El partido de autos (MAS) rechaza la categorización efectuada por la CNE, ya que ésta equívocamente lo define como «voluntades aisladas». Es un partido con una fuerte presencia militante en el ámbito de los Derechos Humanos, siendo uno de los querellantes que han impulsado la reapertura de la causa denominada «Triple A». En el plano político-sindical ha desarrollado corrientes político sindicales internas en los gremios más representativos de la Confederación General del Trabajo (CGT) y de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), igualmente tiene importantes cargos de representación gremial y es inclaudicable su lucha por incentivar la participación del movimiento obrero, en la vida interna de los sindicatos a fin de reforzar la libertad sindical, tanto a nivel de los estudiantes universitarios (...) detenta secretarias en los Centros de Estudiantes correspondientes a las diversas facultades.

“Pero donde más equívoco se torna sostener que el Movimiento al Socialismo (MAS) son meras «voluntades aisladas» es en el terreno político, puesto que a modo ilustrativo, durante el reciente conflicto que se desatara entre el Gobierno y las distintas entidades agrarias, fue el único partido que planteó pública y activamente que no había que encolumnarse detrás de ninguna de las alternativas que hegemonizaban los medios de comunicación y se instaló una carpa en la plaza de los dos Congresos que fue bautizada por los medios de prensa que cubrieron dicho acampe como «carpa roja», en referencia a una tercera posición que representó el reclamo de amplios sectores de la población, que no se reflejaban en ninguno de los bandos en pugna.

En el terreno comicial propiamente dicho, el partido fue uno de los pocos que tuvieron el coraje y la valentía de presentarse ante la Cámara Nacional Electoral y denunciar el mismo 28-10-07, una serie de maniobras fraudulentas que fueran detalladas en el escrito presentado”.

Una maniobra antidemocrática para borrar a la izquierda del mapa político del país

A modo de conclusión, en el recurso presentado expusimos que “un sistema atomizado de partidos políticos no se soluciona decretando caducidades extra-ley (por fuera de ella) con la finalidad de eliminar a partidos políticos no mayoritarios, pues en tal caso la CNE, se estaría constituyendo en un elemento funcional al partido político que se encuentra en el poder, que utiliza a ésta a los efectos de depurar la oposición y simplemente permita subsistir a aquellos partidos políticos que sean obsecuentes con el gobierno de turno o a aquellos que no «molesten» en su accionar. Los partidos políticos de orientación de izquierda siempre han sido perseguidos ya sea por gobiernos de facto o por gobiernos supuestamente “democráticos”, y el Movimiento al Socialismo como tal no ha sido la excepción”.

Sostuvimos seguidamente: “Así, apoyamos el reclamo popular de diciembre de 2001, cuando la sociedad salió a la calle pidiendo que se vayan todos. Siete años después, la credibilidad de la clase gobernante argentina se encuentra más cuestionada que en 2001, pues los «dirigentes» que estaban antes no se fueron, sino que disfrazaron su apariencia, los «nuevos» son peores que los que estaban antes y la Justicia no debe permitir que se acallen las minorías, eliminándolas so pretexto de una supuesta crisis de representatividad”.

La ofensiva hacia las minorías en general y la izquierda en particular no es nueva en este sistema, por ello no confiamos en la Corte Suprema ni en ninguna de las instituciones del sistema, y apostamos a una campaña democrática de exigencia de respeto a las minorías.