Venezuela

Brutal represión a los trabajadores tercerizados
de Sidor

Por Flor Beltrán, para Socialismo o Barbarie

Desde el viernes 17 de octubre, una protesta de miles de trabajadores tercerizados tiene semiparalizada en Venezuela a la Siderúrgica del Orinoco (Sidor), acería que el gobierno nacionalizó al grupo argentino Techint en abril de este año.

La nacionalización había sido precedida a fines de marzo por una dura represión a los obreros que estaban en conflicto con esa multinacional. Pero esto resultó un boomerang para el gobierno de Chávez, que retrocedió dando un giro hacia a la nacionalización de esta empresa.

Ahora la represión ha vuelto a Puerto Ordaz. Los obreros que trabajan en Sidor a través de empresas contratistas, paralizaron sus labores desde el viernes y protestaron este lunes 20 a las puertas de la acería, cerrando una de las principales vías de la ciudad. Allí fueron otra vez brutalmente reprimidos por la Guardia Nacional, una policía militarizada.

“Hay heridos y trabajadores tercerizados detenidos”, declaró a los medios una fuente sindical. Luego, la dirección de la empresa dio a conocer un comunicado diciendo simplemente que “las tareas están normalizadas”, sin mencionar siquiera los reclamos obreros. Por su parte, algunos dirigentes sindicales declararon que “el conflicto cesó porque la Guardia Nacional lo disolvió”.

Sidor emplea en su nómina fija unos 7.000 trabajadores, que se benefician de un contrato colectivo suscripto el pasado mes de mayo. Pero otros 8.600 obreros son “tercerizados” que trabajan para la acería a través de empresas contratistas.

Después de la estatización de la siderúrgica en abril, a los tercerizados se les hicieron toda clase de promesas, como darles beneficios contractuales, ingresarlos a la nómina de la empresa, etc., que por supuesto no cumplieron ni la dirección de la empresa ni el gobierno.

Los obreros tercerizados salieron a reclamar por ese motivo. Después de las medidas iniciadas el viernes, los cortes de calles y vías que realizaron ante la siderúrgica fueron entonces reprimidas por la Guardia Nacional.