Socialismo o Barbarie, periódico Nº 136, 25/09/08
 

 

 

 

 

 

Los secundarios porteños salen a luchar

Basta de ajuste a la educación

Por Alexis y Ale K.

En estos últimos meses los estudiantes secundarios de Capital Federal llevaron adelante la lucha más grande desde el año 2005, y la primera en que enfrentaron masivamente al gobierno de Macri, oponiéndose al recorte de becas y al derrumbe de la educación pública en general, que éste intentaba realizar para poder llevar a cabo todas sus políticas privatizadoras. El jefe de gobierno porteño viene implementando desde que asumió la misma política de asfixia presupuestaria para la educación que el gobierno nacional de Cristina Kirchner, golpeando de esa forma a los estudiantes provenientes de familias de clase obrera y permitiendo que los empresarios lucren en base a la educación.

Si bien la comparación puede resultar chocante, no hay que olvidar que fueron los Kirchner los que sancionaron la Ley de Educación Nacional, que es una lavada de cara de la nefasta Ley Federal de Educación menemista. Gracias a esta ley, la educación pública sigue estando descentralizada (sometida a las mafias políticas locales, en el caso de Capital Federal, la de Macri), se sigue subsidiando a la educación privada y religiosa y se sigue admitiendo la injerencia de las empresas y otras instituciones no estatales en la educación.

Pero si el ajuste del gobierno K y de Macri se hizo más duro en los últimos meses, es en parte por el triunfo reaccionario de las patronales agrarias en el conflicto por las retenciones desatado desde marzo. Fue precisamente por ese triunfo que Macri se vio fortalecido políticamente, porque el planteo abiertamente neoliberal de permitir la exportación sin injerencia estatal es el que logró inyectar vitalidad a esa derecha reaccionaria que venía teniendo que disfrazarse, mantener el perfil bajo. Ahora esa derecha reaccionaria quiere librarse también de la injerencia estatal... en la educación, cosa que demuestra al recortar las becas, mientras el kirchnerismo, supuestamente “progresista”, agacha la cabeza y obedece, destinando la plata que se ahorra en educación (a nivel nacional) a pagarle la deuda al Club de París.

Los hechos

Los estudiantes secundarios nucleados en la CES (Coordinadora de Estudiantes Secundarios), se posicionaron muy correctamente en contra el gobierno K y de su oposición neoliberal “ruralista”, de la que Macri forma parte, porque entendieron que ambos atacan a su manera la educación pública. Esta claridad política les permitió desatar de forma coherente esta heroica lucha contra el recorte de las becas y por el aumento del presupuesto educativo. Daremos a conocer a continuación algunos de los hechos más importantes de este proceso.

-En abril el gobierno anuncia el recorte del 50% de las becas con la supuesta excusa de que el monto de éstas iba a aumentar, y que en realidad muchos de los alumnos que las pedían no las necesitaban, cuando en realidad este aumento no fue ni siquiera a la par de la inflación. Ante esto los centros de estudiantes nucleados en la Coordinadora de Estudiantes Secundarios organizaron marchas al Ministerio de Educación.

-En junio se realizan cortes zonales, un “frazadazo” y un fogón simbólico en la puerta de la Jefatura de Gobierno en reclamo del gas, que faltaba en muchos colegios, al cual asistieron más de 1.000 compañeros, frente al cual se desplegó una fuerte presencia policial, que amenazaba con reprimir si se prendía el fogón.

-En julio los colegios organizan sentadas y asambleas, ya que las becas todavía no habían aparecido y se acercaba la mitad del año. Se toma el Mariano Acosta y se realizan movilizaciones a la Secretaría de Educación de la Ciudad y a Jefatura de Gobierno. La lucha se retoma de forma conjunta tras el fin de las vacaciones de invierno.

-En agosto Macri entrega sólo el 25% o menos de las becas en la mayoría de las escuelas, y los estudiantes responden con una masiva movilización a la Jefatura de Gobierno, sentadas, asambleas y la toma de más de 15 colegios por 72 hs. (entre ellos el Mariano Acosta, el Normal 1, Belgrano, Cerámicas 1, Normal 5, Liceo 3, Moreno, Cortázar, Falcone y Avellaneda). El gobierno ordena a los directivos de distintos colegios colocar sanciones y faltas a los que luchan, formando listas negras para intimidarlos, y además amenaza con extender las clases en los colegios que se encuentren tomados. Algunas escuelas consiguen que se revean algunos casos y se entreguen algunas becas más, pero nunca sobrepasando el 50% de los pedidos.

-En septiembre, los nuevos colegios que se iniciaron en la lucha por las becas comienzan a coordinar por fuera de la CES, convocando a una marcha a la que acuden 1.500 personas. Lamentablemente la CES (hegemonizada por la UJS-PO) llama a no participar de esta marcha, error que luego reconocen. Tras un esfuerzo unitario de las dos partes, se realiza un encuentro de coordinación conjunta en el colegio Rawson a la que acuden 53 colegios. Allí se decide (muy correctamente) conformar una Coordinadora de Unidad, que vota un plan de lucha incluyendo una marcha en conjunto con docentes, terciarios y universitarios y la toma de algunos colegios por 24 hs., culminando en la marcha de la Noche de los Lápices del 16/9.

Un párrafo aparte merece esta última movilización, en la que la agrupación Sudestada, impulsada por el movimiento kirchnerista Libres del Sur, intentó ponerse al frente de la movilización, desacatando lo que se había decidido días antes en la coordinadora. La falta de inocencia de esta actitud se manifestó claramente en que habían traído a un cordón de seguridad del riñón del aparato kirchnerista, que comenzó a empujar, golpear y hasta a tirar piedras a los compañeros que intentaban hacer que depongan su actitud. Esto finalmente culminó con una situación de mucha tensión en la que los centros de estudiantes secundarios, terciarios y universitarios lograron impedir que el grupo de choque kirchnerista ingresara a la Plaza de Mayo, tras lo cual se retiraron, no sin antes herir a varios compañeros. Esta actitud debe ser profundamente repudiada por todo el movimento estudiantil y popular, ya que con los mismos métodos patoteriles el gobierno nacional kirchnerista intenta acallar a todo el que se levanta contra su gobierno pro-patronal.

Los secundarios porteños le demostraron al país, con sus tomas, movilizaciones y organización, cómo enfrentar al ajuste que el gobierno nacional y los gobiernos provinciales quieren hacer pasar. Se suman así a los obreros del Neumático, los docentes y estudiantes universitarios, los estatales y docentes bonaerenses. ¡Todos en pie para derrotar el ajuste K!.