Socialismo o Barbarie, periódico Nº 136, 25/09/08
 

 

 

 

 

 

Sindicato de la Carne

Gran elección de la Roja y Blanca

Por Francisco Torres y ‘Chino’ Heberling

El pasado 18 de septiembre se realizaron las elecciones en el gremio de la Carne. Los datos finales aportados por la Junta Electoral dieron los siguientes resultados: total de votos emitidos 2.212; Lista Azul y Blanca 758 votos, 34,2%; Lista Verde y Blanca 590 votos, 26,6%; Lista Roja y Blanca 534 votos, 24 %; Lista Naranja 313 votos, 14%; en blanco 8 votos y anulados 9 votos.

Con estos números lo primero que salta a la vista es que ganó el “caballo del comisario”: Peretti, es decir, la Azul y Blanca encabezada por Segundo Molina con 758 votos, que fue el que contó con la mayoría del aparato de los delegados perettistas. Pero si bien ganó el “caballo del comisario”, hay que remarcar que no obtuvo la mayoría (el 50% más 1 de los votos) y que estuvo muy lejos de lograrlo. La Azul y Blanca es la primera minoría del gremio ni más ni menos, es decir, es la primera minoría de cuatro minorías. El gran derrotado es Quiroz y se cumplió lo que dijimos: que por culpa de la Naranja perdimos el sindicato los trabajadores.

Una elección “sin” Juan

La burocracia, es decir todos, Molina, Quiroz, Escarafoni, Luis Mora, Medina, etc, y el jefe de todos Juan Peretti no tenía margen político para no hacer la elección después de tres años de auto-intervención dictada por el Ministerio de Trabajo el mismo día que se votaba en el 2005 y que perdían.

En estos tres años “pasó mucho agua bajo el puente”. Por un lado la burocracia terminó de armar su Federación y definió que este paso era estratégico, es decir, definió que jamás de los jamases volverá a la vieja Federación y que debía darle bases sólidas a su nueva Federación dirigida por: ¿adivine compañero? Sí, adivinó, por el mismísimo Juan Peretti. Para eso hizo dos cosas, por un lado reflotó el viejo sindicato con personería gremial del frigorífico “La Negra”, que no existe hace más de  40 años pero que renovó su personería. Con lo cual se aseguró la vida de su Federación, porque con dos sindicatos con personería jurídica se puede formar una federación. Y adivine compañero: ¿quién dirige el sindicato “La Negra”? No, se equivocó, pero por poco, Ignacio Peretti. Sí, el hijo de Peretti,  todo queda en familia, así es la Carne...

La otra cosa para asegurarse su Federación, fue empezar a dividir nuestro viejo sindicato y armar los “famosos” sindicatos por zona, con sólo inscripción gremial, que no sirve por ejemplo, para sentarse en la paritaria y/o homologar trámites en el Ministerio, es decir, no sirve para nada pero es el paso previo para tramitar la que sirve: la personería gremial.

Como Juan definió y acordó con toda la burocracia dedicarse a su Federación y todos asumieron el compromiso de apoyarlo, les dejo libre el paso a su hijos putativos y estos se mataron por el queso.  De todos modos son un “gran” familia y  no hay que sorprenderse que mañana aparezcan de la mano.

Una elección llena de trampas

La pelea entre ellos le generó a Peretti muchas dudas de ganar. Para eso preparó una elección a su medida: llenas de trampas.

Primero, como denunciamos en el Ministerio y ante la Junta Electoral, en los padrones faltaron un montón de trabajadores afiliados y hasta frigoríficos enteros que por supuesto tenía fuerza nuestra Lista, por ejemplo, El Federal, Morón, Penta, etc. Pusieron los lugares de votación donde les convenía a ellos, no hubo urna en Federal, ni en el Morón, por ejemplo. Además, como si fuera poco, agregaron frigoríficos enteros donde oh!! casualidad ellos ganaban y que nunca fueron del sindicato Capital y que quedan fuera del radio de jurisdicción, por ejemplo, Las Heras, Marcos Paz, etc. Y como fuese poco todo el día de la elección dijeron que había una urna en el parque industrial de Burzaco donde tiene base la empresa Offal y que nuestro fiscal nunca la encontró. En la Junta Electoral presentamos la denuncia y nos decían que estaba la urna. Esta era la urna fanstasma que si perdía iba a aparecer llena de votos.

Después que ganaron hicieron lugar a algunas de las trampas más escandalosas, por ejemplo, la urna fantasma apareció con 0 votos y a los frigoríficos Las Heras y Marcos Paz no se los contó.

Un primer balance

El “gran derrotado” es Quiroz y su  Verde y Blanca, se quedó “sin el pan y sin la torta” y para el ex tesorero de Peretti esto es un grave golpe. Ahora habrá que ver si papá Juan le tira un hueso o lo escarmienta para siempre. El dicho dice que “entre bueyes no hay cornadas” veremos…

Pero el dato más importante de esta elección es que, si sumamos los votos de la Roja y Blanca, 534 votos, más los 313 votos de la Naranja se hubieran obtenido 847 votos, suficientes ¡¡¡ para ganar el gremio !!!!.

Lamentablemente se confirma lo que desde la Roja y Blanca veníamos anunciando, que la actitud divisionista de la Naranja rechazando la unidad, sólo iba a favorecer a la burocracia de Molina (Azul y Blanca) que necesitaba dividir los votos opositores, porque sabía que tenían pocos votos por la ruptura con el burócrata Quiroz (Verde y Blanca). La mayoría  de la oposición, más de 13 establecimientos, integraron nuestra Lista contra sólo 4 de la Naranja. Pero lo más importante es que  las bases del gremio premiaron la actitud unitaria de la Roja y Blanca con más de 530 votos.

La mentira tiene patas cortas y ahora después de la elección todo queda claro y serán los trabajadores del gremio los que juzguen las actitudes de cada uno.

La Roja y Blanca en ningún momento hizo “campaña sucia” contra la Naranja, no impugnamos su oficialización pese a que la Junta Electoral perettista la “benefició” haciendo la vista gorda porque no cumplía varios requisitos, tampoco usamos que la Naranja “supuestamente opositora” llevaba como candidato “de lujo” en el 3º lugar a Dante Silvetti personaje que obedece las directivas del patronal Silvio Etcheun y su socio Castells, todos ellos “forros” (a sueldo) de los patrones de la Carne y de la Sociedad Rural, como tampoco ventilamos la actitud “soberbia” de David Soria (referente de la Naranja) cuando en una reunión con más de 30 compañeros del gremio dijo “yo voy a la cabeza”, desconociendo y sin importarle que estaban presentes compañeros delegados de varios frigoríficos y representantes de más de 12 establecimientos. Todo esto se verificó posteriormente en la confección de las listas donde la Roja y Blanca tuvo como candidatos a delegados y activistas de 8 frigoríficos y 4 tercerizadas, cubriendo zona Norte, Sur y Oeste, mientras la Naranja sólo estaba en zona Norte y en 4 lugares, esto influyó en los votos obtenidos por cada Lista.

La Naranja cometíó un gravísimo error al dividir a la oposición y permitir que la burocracia siga por 4 años más, igual sostenemos “que los trabajadores los juzguen”.

Nace una verdadera oposición

Los compañeros del MAS que participamos en la Roja y Blanca hacemos un balance positivo de la elección que realizó la Lista, primero porque pusimos en pie una verdadera alternativa honesta y combativa para el gremio, independiente de la burocracia, la patronal y el gobierno, con esa propuesta recorrimos todo el gremio y conseguimos el apoyo de casi el 25% de los que votaron, ganando en 5 importantes mesas de votación, logramos tener fiscales en 20 de los 21 lugares de votación y también entablamos relación con muchos compañeros con ganas de cambiar el gremio más allá de los resultados que tuvieran las elecciones, teniendo en cuenta la valoración común que Molina o Quiroz eran lo mismo.

El resultado obtenido coloca al Frente Trabajadores de la Carne Lista Roja y Blanca como una agrupación representativa de un sector importante de compañeros del gremio, por eso tenemos el desafío de consolidarnos como una oposición clara y consecuente contra las traiciones que más temprano que tarde cometerá la conducción electa, impulsando desde hoy mismo una campaña para exigir que se normalicen inmediatamente todos los mandatos de delegados,  que en la mayoría de los casos están vencidos hace años.  Que se  convoque a elecciones a delegados simultáneas en todos los frigoríficos sin trampas, con tiempo suficiente para que todos los compañeros se puedan presentar. Es necesario tener representantes de todos los trabajadores, sean afiliados o no, en cada establecimiento, para luchar por el cumplimiento del convenio, aumento salarial y los reclamos de cada lugar, contra la prepotencia patronal.

El primer paso de esta campaña es impulsar que todo el gremio se pronuncie por defender y apoyar efectivamente a los delegados del frigorífico La Huella perseguidos por la patronal, que no los deja ingresar a la planta y les inició juicio de desafuero para despedirlos.