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Universidad de Buenos Aires
El movimiento estudiantil se
pone de pie
Por Juan Cruz y Nacho
Agrupación Ya Basta!
La semana pasada hemos presenciado un nuevo capítulo
de la lucha del movimiento estudiantil por conquistar sus
reivindicaciones. Los estudiantes de distintas facultades
(Filosofía y Letras, Arquitectura), con Sociales a la
cabeza, han salido a la calle, han tomado sus facultades y
se están poniendo de pie para enfrentar el ajuste
presupuestario que el gobierno “nacional y popular” de
Kristina quiere llevar adelante.
Luego de varios meses de disputa entre el
gobierno y el “campo”, y sobre todo luego del triunfo de
éste último, va quedando cada vez más claro cómo se
perfila la Argentina post triunfo de Miguens, Buzzi, De
Angeli y compañía. Todos los políticos pro-campo,
envalentonados con este triunfo, han salido a dar un zarpazo
a los trabajadores: Schiaretti en Córdoba con el recorte
jubilatorio, Binner en Santa Fe con el tarifazo a los
transportes, Macri en la Capital Federal con el recorte de más
del 50% de las becas de los estudiantes secundarios y el
renovado ataque contra los "contratados" del
Gobierno de la Ciudad.
Por su lado, el gobierno K no se queda atrás. Si
bien mantiene su retórica "progre", ha dado
cuenta de que su plan original ha fracasado y de que después
del voto "no positivo" de Cobos ha quedado muy
debilitado, por lo que ha echado mano a políticas un poco más
ortodoxas. Mantiene cerradas a rajatabla las paritarias,
gracias a la inefable colaboración de la burocracia
sindical, para que sus socios puedan seguir disfrutando de
importantes ganancias; desembolsa una importante suma de
dinero para rescatarlos, como es el caso de la española
Marsans (dueña de Aerolíneas), si es que por algún motivo
ya no le resulta rentable su negocio, o pone un dólar
arriba del otro, hasta sumar U$S 6.700 millones (20 veces el
presupuesto miserable de la UBA) para pagarle todo junto y
de una buena vez, la deuda ilegítima al Club de París.
Con este panorama, es decir, con sectores
reaccionarios fortalecidos, con un gobierno debilitado que
para buscar reacomodarse lleva adelante políticas más
acordes a un "país en serio", no puede esperarse
otra cosa que la profundización del ahogo presupuestario
para el conjunto de las necesidades populares, y en
particular para la educación.
El hartazgo de los estudiantes de Sociales frente
a las condiciones de cursada se rebalsó con tres hechos de
importancia. El primero, la caída de una viga de una puerta
del baño de mujeres de MT que casi lastima a una compañera.
El segundo, la toma de 13 colegios secundarios en reclamo
por la suspensión de becas en colegios de la Capital
Federal, que indicaban el camino a seguir ante la existencia
de reclamos, y por último, la indignación de ver cómo un
gobierno hace oídos sordos a la crisis presupuestaria de la
Universidad y deposita millones de dólares para saciar una
deuda ilegítima, justificada con la vieja cantinela de que
ahora la Argentina sería vista como "un país
confiable para los mercados internacionales". Este cóctel
detonó el martes 2, con asambleas masivas en las tres sedes
que decidieron tomar la facultad.
De aliados y enemigos
Otra importante conclusión que tenemos que sacar
es quiénes están de nuestro lado y a quiénes tenemos que
derrotar.
En todas las asambleas que se hicieron, así como
en muchas de las actividades que se llevaron adelante
durante los días de toma, se acercaron a traer su apoyo los
trabajadores de Fate y Pirelli. Los compañeros vienen
protagonizando una heroica pelea contra más de 200 despidos
en todo el gremio y por aumento salarial, enfrentándose a
las traiciones de los burócratas, que en común acuerdo con
las patronales y el gobierno quieren liquidar esta
experiencia histórica de recomposición del movimiento
obrero argentino.
Es importante señalar que lo que están
sufriendo los compañeros del neumático es también parte
del ajuste post triunfo del campo, porque para que los
patrones sigan "compitiendo" en buenas condiciones
en el mercado internacional es necesario mantener bajos los
costos, o, lo que es igual, que los trabajadores sigan
siendo explotados y esclavizados. Lo mismo busca el intento
de expulsar al cuerpo de delegados del subte por parte de la
burocracia de la UTA, suspendido de momento ante la presión
que metió al gobierno K la amenaza legítima del paro de
todas las líneas de la ciudad. También estuvieron
presentes trabajadores que dependen directamente de la caja
del Estado y a quienes el ajuste les pega tan directamente
como a los estudiantes. Trabajadores del IndeK, del Gobierno
de la Ciudad y por supuesto docentes universitarios y
estudiantes secundarios, que vienen protagonizando una
impresionante pelea contra el recortazo del campestre Macri.
El movimiento estudiantil tiene que buscar profundizar
lazos de unidad y coordinación con estos sectores y con
todos los sectores de trabajadores que están sufriendo las
mismas políticas de ajuste, para poder enfrentarlas de
conjunto.
Es importante entender que nos enfrentamos ni más
ni menos que al gobierno de Kristina y la política de los
utraderechistas del campo (desde Miguens hasta el
reaccionario De Angelis), y esto nos impone profundizar
lazos de unidad y coordinación con todos los sectores de
trabajadores y estudiantes que están sufriendo las mismas
políticas de ajuste, para poder enfrentarlas de conjunto.
Pero también es muy importante avanzar en la
experiencia con las organizaciones como el PCR, MSTe
Izquierda Socialista que han apoyado explícitamente a los
chacareros, y que hoy discuten desde las asambleas de qué
manera derrotar el ajuste. No se puede estar con los
trabajadores y el movimiento estudiantil, y con el gobierno
y los patrones. No se puede derrotar el ajuste apoyando a
los que ajustan.
Son estas mismas organizaciones pro-campo las que
mantuvieron enchalecado al movimiento estudiantil durante la
crisis, ayudadas por las lamentables direcciones híbridas
(compuestas por organizaciones que se proclamaron
independientes, como el PO y el PTS, y las pro campo
antedichas) en centros de estudiantes y en la FUBA limitando
un claro posicionamiento independiente por parte del
movimiento estudiantil. Y son las mismas organizaciones que
hoy se niegan a la discusión política, por ejemplo, como
planteó el presidente de la FUBA por el PCR de "que
hable un orador por organización"
en diferentes asambleas. Son las mismas
organizaciones que mantienen la FUBA cerrada a la
participación del movimiento estudiantil.
Es muy importante comprender que las tomas de
facultades, las marchas, las clases públicas, no nos
resuelven por sí los problemas de falta de presupuesto en
sus distintas variantes (edificios en mal estado, salarios
paupérrimos o trabajadores sin salarios, falta de cupos
para cursar y mil más). Por esto debemos
profundizar mucho más las discusiones políticas,
cuyas conclusiones deben ser la guía de las luchas que
damos. Ésa es la única forma de conseguir nuestras
reivindicaciones. ¡¡Vamos por eso!!
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