Chaco

Persecución gremial y política a luchador

Entrevistamos a Orlando González, delegado del UPCP, de la Casa del Sol, en la localidad de Las Garcitas, del interior de la provincia.

SoB: ¿Cómo empieza el conflicto?

Orlando: Soy delegado de la Unión del Personal Civil de la Provincia. Hubo un cambio de gobierno en la provincia del Chaco, al entrar un nuevo gobierno justicialista aliado con la línea kirchnerista. Creo que hay una debilidad política del gobierno; como no esperaba que los radicales perdieran, no tiene dónde sustentarse y se para a través de las intendencias de la provincia. Entonces los intendentes empiezan a definir qué contratados quedan, qué contratados no, qué personal de planta hace un traslado y quiénes no, de acuerdo a la política de cada municipio. Es a partir de ahí que los intendentes empiezan, más o menos en octubre, a echar a subcontratados en relación de dependencia con la intendencia que son jornalizados. A partir de ahí empiezo a juntarlos, a organizarlos, con el objetivo de tratar de conseguir que se le renueve su contrato. Sin fundamento los echaron a todos.

SoB: ¿Los contratados estaban jornalizados?

Orlando: Sí, así empezó la lucha y mi participación activa en cuanto a la defensa de los trabajadores municipales jornalizados. Nosotros a través de una nota en un diario conocido en el Chaco, Norte, denunciamos el pacto del gobernador con los intendentes y lo que se venía. Empezaban con estos jornalizados porque eran los más próximos al intendente, tenían poder sobre eso. Lo que se venía, a partir de que se reafirmen en cada ministerio, era barrer con los contratados. Aparte, anularon una ley que sacó el gobierno que se va de que todos los contratados automáticamente renovaban sus contratos. Entonces los contratados quedan sin nada, en el aire. Nosotros denunciamos esa situación y a fines de diciembre se terminan los contratos de los provinciales. Estamos hablando de un pueblo chiquito, de 8.000 habitantes, unos 40 contratos más o menos.

SoB: ¿Qué consecuencias tuvo esta medida?

Orlando: La primera experiencia, cuando sacamos esa nota en el diario, la hacemos en el marco de que el gobernador Capitanich iba a la localidad. La única posibilidad que teníamos era exponerlo a nivel provincial. Eso fue en la primera instancia, cuando organizábamos a los jornalizados. Cuando pasamos a la otra instancia, ya a fines de diciembre, se terminan los contratos de los contratados provinciales, es donde empezamos a hacer toda una movilización, organizarnos, porque los gremios desaparecieron, los partidos políticos también. UPCP desapareció como gremio, estaban todos de vacaciones, se tomaron las licencias, no quedó nadie, los trabajadores estaban solos. Principalmente empieza a organizarse un sector chiquito que después fue creciendo, y participamos de una movilización en Casa de Gobierno para pedir la renovación de los contratos de todos. De Educación, los porteros, del Ministerio de Gobierno, del Ministerio de la Producción, del Registro Civil y de todos los contratados que estaban en la misma situación.

SoB: Estuviste detenido, ¿cómo fue este hecho?

Orlando: Mi detención tiene que ver con lo anterior, que habíamos dejado en evidencia, tanto al gobernador como al intendente de esta situación de persecución y de lo que se venía, los despidos de todos los contratados, porque teníamos conocimiento de que a ningún contratado se le iba a renovar el contrato de esa localidad, Las Garcitas. Entonces nos organizamos y la peleamos y renovamos casi todos los contratos, excepto uno. Nos reorganizamos de nuevo para pelear todos solidariamente por ese contrato y veníamos en esa pelea, que fue todo enero, y el 5 de febrero Capitanich llegaba a la localidad Las Garcitas. En ese marco, habíamos preparado unas actividades para poner en evidencia lo que él había prometido: no echar a ninguna persona, renovación de contratos a todos los que trabajaban. Era todo mentira. En ese marco, el 5 de febrero a la madrugada, a las 3 y media de la mañana, cuando habíamos estado reunidos con los compañeros y me dirigía a mi casa, una patrulla me levanta. Se bajaron, con pistola en mano, con esposas. Creo que era por “sospechoso”, por creer que podíamos hacer algo para movilizar a los trabajadores.

SoB: ¿Estuviste 17 horas detenido, no?

Orlando: Eso fue 3 y media de la mañana, donde me alojaron sin ningún tipo de justificación, me dejaron detenido, me encerraron, no me dieron una explicación hasta después de una hora y media de estar encerrado, por una supuesta contravención de una pintada que apareció a 25 km y por alguna otra cosa, como “aliento a alcohol”, entonces pusieron como que andaba alcoholizado en la vía pública. Estuve incomunicado hasta el mediodía, donde se presenta el abogado a tratar de sacarme. Y ahí aparece toda una relación entre el Poder Judicial, la Policía y el intendente peronista de Las Garcitas, por la cual me mantienen preso hasta que Capitanich se va del pueblo. Capitanich venía a las 5 de la tarde y a mí me soltaron a las 7 y media de la tarde.

SoB: También te notificaron que habías sido trasladado de tu lugar de trabajo.

Orlando: Sí, es así. Un compañero nos faltaba. Seguimos en la lucha. Ese mismo día que Capitanich estuvo, a ese compañero le renovaron el contrato. Después de eso viene el golpe hacia mí. Lo que hacen es: “Está bien, te detuvimos, nos jodiste con el tema, renovamos todos los contratos que nosotros no queríamos, queríamos poner otra gente, y bueno, ahora te trasladamos. Acá nos molestás y te vamos a trasladar adonde sea”. Así es que definen al mes, yo me notifico el 7 de marzo que estaba trasladado.

SoB: Evidentemente, es una violación a tu derecho, en primer lugar como trabajador y como representante gremial. ¿Esta medida está directamente avalada inclusive por la Secretaría de Derechos Humanos del gobierno de la Provincia?

Orlando: Sí, he recurrido al Ministerio de Gobierno de la Provincia, se ha creado una Secretaría de Derechos Humanos, hemos recurrido al Colegio de Asistentes Sociales, porque soy asistente social, que se solidarizan con mi situación, y recurrimos a Derechos Humanos para ver cuáles son las condiciones, cuáles son los derechos laborales. Allí nos encontramos con un abogado de la Secretaría de Derechos Humanos que nos plantea, cuando le paso la resolución de traslado: “Ah, no, pero no tenés nada que reclamar, yo hice lo mismo, yo trasladé un montón de gente”. Justo a ellos voy a recurrir, cuando él hizo lo mismo como jefe de Departamento, correr a un montón de gente.

SoB: ¿Qué campaña iniciaron ante estos atropellos?

Orlando: Recurrir al gremio en primera instancia para presentar un recurso formal, dentro del área administrativa. A partir de ahora, con la solidaridad de todos los compañeros, tratar de hacer pública esta denuncia, estamos haciendo firmar un petitorio pidiendo el apoyo a los trabajadores, porque debe ser el primer caso de la gestión de Capitanich de que a un delegado gremial lo trasladan a otro lugar para sacárselo de encima.