Socialismo o Barbarie, periódico Nº 122, 20/03/08
 

 

 

 

 

 

Mafissa: Ante la nueva asamblea trucha del gremio el 28

Derrotar el ataque de Curi, la AOT y Scioli contra
la comisión interna y la lucha

Por Ariel Orbuch

El gobierno provincial volvió a demostrar de qué lado está en el conflicto de Mafissa. Había generado expectativas en que si los trabajadores flexibilizaban su postura, el Ministerio de Trabajo podía actuar para destrabar la situación. Los obreros presentaron su propuesta para abrir la negociación, pero jamás encontraron una respuesta seria para encaminarse a una posible solución.

Es más, el Ministerio de Trabajo se negó a fiscalizar una masiva asamblea de trabajadores el pasado sábado 15, escudándose en que la Asociación Obrera Textil (AOT) la desconocía. El gobierno trata de tapar su responsabilidad pasándole la pelota a la AOT, que a su vez “presta” su sede para que la patronal la use como oficina de personal. Como en todos los conflictos bajo Kristina, los trabajadores se enfrentan al trío gobierno-patronal-burocracia.

Pero los trabajadores no confiaron en la “promesa” del gobierno y siguieron adelante con las medidas, recorriendo distintos sectores de trabajo y estudio para difundir el conflicto y avanzar en el fondo de huelga, haciéndose presentes con mucha fuerza y un documento en la marcha por López a un año y medio de su desaparición, entre otras cosas.

En una reunión de la multisectorial con la interna en la puerta de la fábrica, se dio un gran paso adelante al definir los delegados hacer eje en el reclamo a Scioli en las pintadas. Desde el nuevo MAS planteamos que esa instancia se tiene que convertir en un verdadero comité de lucha en el que el activismo que garantiza la toma, con la comisión interna a la cabeza y los distintos sectores que apoyamos, podamos intercambiar ideas sobre el conflicto y las tareas a llevar a cabo. Eso no implica que los partidos queremos pasar por arriba de los trabajadores de la fábrica. Está claro que las decisiones las toman los trabajadores en asamblea. La democracia obrera se potencia cuando se clarifican las distintas posiciones de los que le ponemos el cuerpo al conflicto en un ámbito común. Siempre entre los trabajadores hay distintas posiciones. Las discusiones entre los partidos que nos reivindicamos de la clase trabajadora son expresión de eso. Para nosotros, democracia obrera y politización van de la mano.

¿Cómo enfrentar la “asamblea” de la AOT, la patronal y el gobierno?

Ahora la AOT llamó a una asamblea nuevamente en su sede central en Capital para “discutir y resolver el pedido de desplazar a los delegados”. La AOT pide abiertamente el desalojo de la fábrica, incluso vía judicial. Busca dejar sin fueros gremiales a los delegados para que su socia, la patronal, los eche, y deslegitimar cada vez más la lucha para abrir paso a la represión.

Los trabajadores rechazan la asamblea al servicio de la patronal y convocan a una en la fábrica para el otro día, ya que muchos compañeros están haciendo changas y el sábado se gana en masividad.

Nos parece que en esta ocasión sería mejor hacer la asamblea en la fábrica el mismo viernes, y que todavía se está a tiempo de rediscutirlo. Polarizar sirve para discutir a fondo con compañeros que creen que la única manera de entrar a trabajar es agachando la cabeza ante la patronal y la burocracia, para horadar la pequeña pero real base que la empresa y la patronal construyeron. Por otro lado, para explicar a los compañeros que hoy están con la interna y la lucha, pero de manera pasiva, que se vienen instantes definitorios y que se precisa aumentar la participación.

Nos parece que habría que instalar en las calles en estos días que la asamblea de Mafissa es en Olmos y no en Capital. Se podría hacer una marcha al Ministerio de Trabajo, con el apoyo de las organizaciones, para imponerles que tengan que fiscalizar la asamblea de los trabajadores. Como se votó en asamblea, lanzar con todo el planteo de que se va a defender la fuente de trabajo como sea, y que si Curi no quiere producir, que el estado provincial se haga cargo. Es decir, poner en el centro un programa acorde a un momento de definición. Eso es lo que además puede activar a compañeros que están con la lucha pero tienen miedo de quedar pegados con la ocupación porque la ven difícil. Verían que hay una perspectiva, que aunque no es fácil, va por la fuente de trabajo de todos. Más que nunca ¡viva la lucha de los obreros de Mafissa!