Socialismo o Barbarie, periódico Nº 120, 21/02/08
 

 

 

 

 

 

Ocupación de planta para enfrentar los despidos

Apuntarle a Scioli, la mejor medida solidaria con
los trabajadores de Mafissa

Corresponsal

Los trabajadores de la textil Mafissa de Olmos (La Plata) dieron una nueva muestra de espíritu combativo al ocupar la planta luego de 80 días sin respuesta a los 103 despidos realizados por la empresa en noviembre, que se agravaron con la suspensión del resto del personal a fines de enero.

Al cierre de esta edición, la santa alianza entre el gobierno, la patronal y la burocracia desarrollaba una ofensiva para aislar y deslegitimar la lucha para preparar el terreno a un posible desalojo.

Como viene pasando en todos los conflictos, el gobierno le da el espaldarazo a la burocracia para atacar abiertamente a los trabajadores en lucha: en este caso la Asociación Obrera Textil hizo una “asamblea” en Capital Federal, a 60 kilómetros del puesto de lucha, en la que decidió “aceptar la oferta del patrón Curi”, es decir, entregar la pelea y generar condiciones para dejar a los compañeros a merced de la represión. Los compañeros, correctamente, denunciaron a esa supuesta asamblea, ya que todo se decide en la fábrica con el método de la discusión franca y la votación a mano alzada.

La Justicia, por su parte, hizo una inspección a la fábrica, en la que, de manera provocadora, exigió el ingreso del jefe de personal rodeado de policías, para patrullar juntos las instalaciones.

A los compañeros los ataques les llegan desde distintos ángulos: patronal, burocracia, Ministerio de Trabajo, Justicia. Por eso es central hacer eje en quién está detrás de todo eso: el gobierno de Scioli, que en la misma sintonía que Kristina pone policía para custodiar la “asamblea” de la burocracia y se hace el distraído en su obligación de sancionar el lock out patronal, con lo que le permite a Curi seguir adelante en el ataque.

Inundar La Plata con la solidaridad a Mafissa

Las organizaciones políticas y sociales que nos jugamos por el triunfo de la lucha, al mismo tiempo que mantenemos el acampe de la fábrica, debemos hacer una fuerte campaña de solidaridad en el centro de La Plata (a 8 kilómetros de la fábrica) para marcarle la cancha a Scioli y exigirle el lock out, al tiempo de responsabilizarlo de cualquier intento represivo. Esa es la mejor manera de hacerle el aguante a los compañeros de Mafissa. En ese sentido, se hizo un corte en la céntrica 7 y 50 y el jueves una actividad en la Plaza San Martín con las mujeres de los trabajadores y sus familias junto a Las Rojas y otras agrupaciones de mujeres. De no profundizarse esta orientación, limitándonos centralmente a garantizar el acampe, aceptamos que sólo nos queda resistir. Sabemos que la lucha se da en condiciones muy difíciles pero no nos tenemos que replegar. Mafissa es una de las luchas más importantes de las que los trabajadores vienen protagonizando desde hace tres años. Debemos ayudar a que esta experiencia pase esta dura prueba y, de cara a las nuevas luchas que vendrán, se convierta en un referente para los nuevos conflictos. A eso nos jugamos con todo.