Socialismo o Barbarie, periódico, Nº 108, 17/08/07
 

 

 

 

 

 

Elecciones a gobernador en Córdoba

Hace falta un movimiento político de los trabajadores

Por Adrián Peryam

En la provincia se vota el próximo 2 de septiembre a gobernador. Se trata de una elección en la cual De la Sota no puede ser reelecto, pero todo indica que su vice, Juan Schiaretti, es quien tiene más posibilidades de sucederlo. Más atrás en las encuestas viene la UCR (a base de haber mantenido varias intendencias en el interior de la provincia). Y, en tercer lugar, otro candidato K: el actual intendente de Córdoba Capital, Luis Juez, apoyado por sectores de la Iglesia y que lleva en la lista sectores patronales representantes, entre otros, de fábricas como la FIAT.

Las elecciones se van a realizar en un marco que no escapa a la realidad del país, con una clase obrera que comienza a luchar por sus reivindicaciones, aunque más “puertas adentro” que hacia fuera y sin proyectarse políticamente.

En este marco, la izquierda vuelve a presentarse en distintas formas. El PC, como en Capital Federal, va con sectores del kirchnerismo, llevando la boleta de gobernador de Luis Juez. Otro partido que se presenta es el MST, que luego de la separación con Izquierda Socialista en la provincia quedó muy disminuido, sin figura pública y recurre a nacionalizar un poco la campaña sosteniendo algo que se podría resumir en la siguiente frase: “Si votó a Izquierda Unida, o a Patricia Walsh, vótenos a nosotros por la construcción de una nueva izquierda”. De los únicos que se “delimitan” es de la izquierda que milita día a día en el movimiento obrero, y por eso buscan “espacios amplios” con sectores que no participan y no están en la vanguardia. En síntesis: cada vez menos en la lucha cotidiana y más en la lucha electoral.

La conformación del FIT

El FIT (Frente de Izquierda y los Trabajadores) conformado por IS y el PO, es sin duda la “novedad” de la izquierda. Presentado por sus candidatos como un “espacio abierto” a todos los luchadores, lo concreto es que a la hora de anunciar esta “apertura”... el frente ya tenía los candidatos definidos. Con Liliana Olivero (IS) como candidata a gobernadora y Eduardo Salas (PO) a vice, se lanzaron a la campaña (como se informa en esta misma edición, algo parecido es lo que está intentando reeditar el PO en las discusiones en el seno de la izquierda para las elecciones nacionales).

Esto es así más allá que del acuerdo entre estas dos corrientes saliera un llamado a “sumarse” tanto al PTS como al nuevo MAS. Pero la realidad es que en ningún momento abrieron realmente su acuerdo para que otros se sumasen, porque en caso de hacerlo igualmente ya estaba todo resuelto.

En resumidas cuentas: no hubo una apertura real al diálogo para conformar un Frente de Izquierda y de los Trabajadores que contenga a todos los que venimos luchando y a todas las organizaciones que nos consideramos clasistas, peligro que, insistimos, se puede volver a producir en el orden nacional.

Ante este panorama, desde el nuevo MAS (con la alegría de haber obtenido nuestra legalización en la provincia, de la que informamos por separado), consideramos que más allá de cuestiones tácticas inmediatas, la tarea de fondo en el terreno político sigue siendo poner en pie un Movimiento Político de los Trabajadores.

Al servicio de esta orientación más estratégica, hubiese sido un paso adelante la conformación efectiva de un frente que representara –de alguna manera y en conjunto con todas las expresiones de la izquierda consecuente– los procesos de lucha de la provincia como la Clínica Junín, los trabajadores de Cargo, los de la Ex Perkins y otros sectores que vienen peleando.

En estas condiciones, en estas elecciones provinciales, desde el nuevo MAS llamamos a votar críticamente a las expresiones más independientes y de clase, que a pesar de todas las diferencias que tenemos, se reflejan tanto en el FIT como en el PTS, haciendo esto como parte del esfuerzo para que en las elecciones de octubre a nivel nacional pero también en Córdoba, logremos dar una respuesta en común entre el PO, el nuevo MAS, el PTS y la IS.