Socialismo o Barbarie, periódico, Nº 96, 08/02/07
 

 

 

 

 

Cambio climático

Pavoroso informe científico

Por Claudio Testa

El viernes 2 se dio a conocer en París el informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC en sus siglas en inglés), auspiciado por la Organización de las Naciones Unidas. Fue redactado por un equipo internacional de 2.000 científicos, especialistas en diversas disciplinas relacionadas al tema.

Sombríos pronósticos

El informe traza un cuadro sombrío. Sostiene que está en marcha un proceso de cambio mundial del clima, con consecuencias que pueden ser catastróficas y que pondrían en peligro hasta la misma supervivencia de la humanidad.

La temperatura promedio podría aumentar en este siglo hasta 4 grados. Pero si se mantiene el uso irrestricto de combustibles fósiles y contaminantes, el calentamiento podría llegar a los 6,4 grados.

Entre la lista de desastres que esto provocaría se pueden mencionar el deshielo del Polo Norte y de la Antártida. En el resto del mundo, los glaciares prácticamente desaparecerían durante el siglo XXI.

La expansión térmica del agua debido al aumento de temperatura y el deshielo de los polos y de los glaciares de montaña harán inevitable un aumento del nivel del mar, hasta de casi 60 cms. Esto amenazaría la existencia de países enteros, como Holanda o Bangladesh, además de  los atolones del Pacífico y centenares de islas.

El aumento de la temperatura se traducirá también en una mayor frecuencia de los fenómenos climáticos extremos. Aunque ningún ciclón o huracán se atribuye directamente al cambio climático, los científicos sí vinculan su mayor frecuencia o violencia al calentamiento global.

Simultáneamente, la alteraciones del clima tendrán por consecuencia fenómenos contradictorios según las regiones, pero en general nada buenos. En algunas regiones, tenderán a producirse lluvias torrenciales que causarán inundaciones. En otras, por el contrario, la creciente escasez de lluvias provocará o aumentará la desertificación de amplias áreas del planeta.

Todo esto tendrá graves impactos sobre vida en la superficie y los océanos. Las especies de plantas y animales ya están viendo trastocados sus ciclos vitales. Esto asume una inmensa variedad de formas. La floración de muchas especies vegetales se altera. Cambian los ciclos migratorios de las aves. Infinidad de especies verán destruidos su habitat natural, con lo que podrían desaparecer.

Dos conclusiones categóricas

En verdad, el informe del IPCC no aporta ningún descubrimiento mayor. La importancia de esta investigación reside en que confirma de manera categórica dos hechos que pretenden ser negados por varios gobiernos (especialmente el de EEUU) y por las empresas más contaminantes (sobre todo las petroleras):

1) Que existe un proceso de calentamiento global iniciado aproximadamente hace un siglo y que se va acelerando.

2) Que esto se debe a la actividad humana, principalmente a la emisión de dióxido de carbono (CO2) -producto del uso de combustibles fósiles (carbón, petróleo)– y también de otros gases industriales como el metano, el óxido nitroso y los fluorados.

Durante mucho tiempo, ambos hechos han sido interesadamente puestos en duda. La comunidad científica desde hace años coincide en esas conclusiones. Pero en los medios suelen aparecer toda suerte de charlatanes pagados principalmente por las petroleras que ponen en cuestión los estudios sobre el cambio climático, impugnando alguna de estas dos conclusiones o ambas a la vez.

Se ha ido desarrollando así un fraude similar al de los “expertos” a sueldo de las compañías tabacaleras, que durante décadas sostuvieron que no había ningún indicio que relacionara el hábito de fumar con el cáncer de pulmón. Sólo que, en el caso del clima, las consecuencias del fraude van a ser infinitamente más graves.

Aunque el informe del IPCC es concluyente, a nivel de la “opinión pública” va a seguir la batalla por crear dudas o por lo menos relativizar su conclusiones. En ese sentido, el diario inglés The Guardian informaba que “el American Enterprise Institute (AEI), centro de estudios conservador financiado por una de las mayores petroleras del mundo, ha ofrecido dinero a científicos y economistas para que pongan en tela de juicio el informe del IPCC... Este grupo de presión, está financiado por Exxon Mobil y tiene estrechos vínculos con el gobierno de George Bush... El American Enterprise Institute ha recibido más de 1,2 millones de euros de la petrolera estadounidense y más de 21 personas de su plantilla han trabajado como asesores para la actual Casa Blanca. El ex presidente de Exxon Mobil, Lee Raymond, es actualmente vicepresidente del patronato de ese centro de estudios...”. (EFE, 01/02/07)

Hay que recordar que el American Enterprise Institute (AEI) es el mismo “centro de estudios” que acaba de diseñar la “nueva estrategia” adoptada por Bush para ganar la guerra de Iraq. (Ver en SoB Nº 95 “«Nueva estrategia» para Iraq: escalada en la guerra”).

Como se ve, estos buenos muchachos tienen soluciones para todo...