Socialismo o Barbarie, periódico, Nº 82, 06/07/06
 

 

 

 

 

 

La alharaca de los medios en torno al soldado israelí prisionero esconde
una realidad

Hay más de 9.000 presos políticos palestinos

Recopilación enviada por M. Kaila y E. Abedrapo
En base a datos del Mandela Institute for Humans Rights

Desde el inicio de la ocupación de Cisjordania y Gaza en 1967, Israel ha encarcelado a más de 650.000 palestinos, representando aproximadamente el 20 por ciento de la población de los territorios ocupados.

Israel ha detenido a hombres, mujeres y niños a través de una extensivo y sistemático conjunto de regulaciones que controlan casi todos los aspectos de la vida palestina y que son cambiadas constantemente por el ejército ocupante israelí y muchas veces no son conocidas por la población hasta que es reprimida.

Los detenidos palestinos son llevados a centros de detención israelíes tanto dentro como fuera de Israel, donde la condición de los prisioneros palestinos es pésima, agravada por el uso habitual de la tortura.

Los presos palestinos que no están en “detención administrativa”, son juzgados en tribunales israelíes, en un idioma que muchos de ellos no hablan y dictando sentencias a veces absurdas, generalmente basadas en testimonios de los soldados que apresaron a la persona, las “confesiones” logradas por medio de torturas, e incluso muchas veces sin la presencia de un abogado.

Los métodos de tortura utilizados son variados. Los más comunes son las golpizas, los shocks eléctricos, la privación de sueño, denegación de atención médica, música ruidosa, violaciones sexuales, insultos, estiramiento de extremidades, privación de comida o agua o el uso del baño, presiones psicológicas para colaborar con la ocupación, introducción de la cabeza de los detenidos en sacos con orina o excremento, prolongada exposición a luces brillantes, al sol, al frío, a la lluvia, etc. El método más famoso es la “Posición Shabah”, donde se le obliga al prisionero a permanecer sentado en una pequeña silla, con sus manos esposadas al respaldo y sus pies amarradas a las patas de la silla. En esta posición, el prisionero/a se encuentra más débil frente a las golpizas y shocks eléctricos.

En el informe del Instituto de Mandela para Derechos Humanos del 30 de abril de 2006, se expresa que los prisioneros palestinos alcanzaban para esa fecha 9.599 personas, 1.200 de los cuales eran “detenidos administrativamente”, es decir, no tenían cargos y el 34% de los detenidos estaba a la espera de un juicio.

Sin embargo, ahora la cifra de prisioneros palestinos ya llega a las 10.000 personas, 150 de las cuales  son mujeres y 350 son niños menores de 10 años. Algunas  mujeres han tenido a sus hijos en prisión, quedando el niño prisionero con la madre como el caso de Samar Soboh. Otras tantas han cumplido los 18 años mientras estaban en prisión. Muchas mujeres palestinas han sido arrestadas sólo para presionar a sus maridos o familiares a que cooperen con la ocupación.