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A dos años de la tragedia minera de Río Turbio
No olvidamos
Por Oscar Alba
El 14 de junio se cumplieron
dos años de la tragedia minera de Río Turbio. Allí murieron catorce trabajadores
del carbón, que no sólo enlutó a los mineros de Turbio sino que también fue un
duro golpe para los trabajadores de todo el país. La lucha por el castigo a
todos los responsables debe continuar.
En aquel entonces denunciamos junto a los mineros que
existía una responsabilidad política y una responsabilidad operativa. Y
señalamos como responsables políticos al gobierno nacional y provincial, junto
con los funcionarios como el actual interventor en la empresa, Daniel Pereira,
quien cuando estaba al frente de la Secretaría de Trabajo de la provincia
cajoneó las innumerables denuncias que en su momento hicieron los mineros sobre
las pésimas y riesgosas condiciones laborales en la mina. Es el caso también de
Daniel Cameron, quien estuviera al frente del organismo que debía controlar todo
lo referente al funcionamiento de la mina durante la gestión del empresario
Sergio Taselli y ahora es Secretario de Energía de la Nación.
Pero si estos personajes continúan sin pagar sus
responsabilidades se debe a que están bajo el ala del principal responsable, que
es el presidente Néstor Kirchner. Y si bien señalamos desde un primer momento la
responsabilidad de Kirchner, hoy a dos años de la muerte de los catorce
compañeros esa responsabilidad se ha hecho mucho más evidente, puesto que desde
entonces la justicia kirchnerista no ha profundizado la investigación y mucho
menos ha señalado a los verdaderos culpables. La burocracia de la Lista Verde de
ATE fue la otra pata en la que se apoyó el gobierno para tapar su
responsabilidad. Desde De Gennaro, Micheli y hasta Lino Heredia, actual
secretario general de la seccional de ATE-Río Turbio, se han esmerado para
desviar una y otra vez los reclamos de justicia de los mineros.
Este gobierno que resguarda a los empresarios como Taselli
para que sigan engordando sus bolsillos a costa de la vida de trabajadores es el
mismo que en su propia provincia reprimió a los petroleros en huelga de Las
Heras.
Una lucha que debemos retomar
La lucha por la investigación y castigo de los responsables
de la tragedia de Río Turbio debe continuar. Los mineros han dado muestras
sobradas de su capacidad de lucha. El desconocimiento de la Lista Verde como
auténtica dirección y la conformación de la Comisión Provisoria a poco de la
tragedia fue producto de esta capacidad de lucha. Lamentablemente, la
orientación que ésta fue llevando no permitió aprovechar el momento inmediato en
que la mayoría de los mineros estaban dispuestos a seguir avanzando. De esta
manera, los meses sin trabajar en la mina fueron transcurriendo y los mineros
se desmovilizaron. La puesta en marcha de la mina nuevamente, con nuevos
contingentes de trabajadores, nos plantea la necesidad de retomar la pelea. Los
nuevos trabajadores que han ingresado a la mina deben hacer carne el reclamo de
justicia por los compañeros muertos en el incendio del 2004. Ellos no tienen aún
la experiencia que han acumulado durante varios años los mineros de más
antigüedad. Por eso, en primer lugar esta pelea debe replantearse desde Río
Turbio, que es donde se concentra el conjunto de los trabajadores mineros. Y la
Lista Negra debe recomponerse como auténtica dirección. No en actos alejados de
los mineros, como el pasado 14 de junio, en Río Gallegos, más allá que el acto
tuviera su propio valor, sino junto a todos los trabajadores del carbón,
peleándole palmo a palmo la dirección de los trabajadores de la Cuenca
Carbonífera. Por último, reafirmamos que la primera tarea es enfrentar al
gobierno y su política, buscando la confluencia con los petroleros de Las Heras,
los trabajadores de la salud de la Provincia y, en una escala nacional, con los
que luchan en todo el país.
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