Socialismo o Barbarie, periódico, Nº 72, 10/02/06
 

 

 

 

 

 

A trece meses de la masacre de Cromañon

“Ni la bengala/ ni el rock and roll/

 a nuestros pibes/ los mató la corrupción”

Por Ariel Orbuch

Más allá de los matices entre los distintos grupos de padres y sobrevivientes, las marchas para lograr justicia ante la muerte de 194 personas en Cromañón apuntan con claridad contra Chabán y Aníbal Ibarra, que le garantizaba la impunidad al empresario para lucrar a costa de la vida de los jóvenes. También se denuncia a Kirchner como el principal encubridor del jefe de gobierno porteño.

Con esos mismos ejes se desarrolló la marcha de Plaza de Once a Plaza de Mayo del 30 de enero pasado, a 13 meses de la tragedia de la que ¡Ya Basta! participó. Pero para sorpresa de la mayoría, hacia el final del acto una familiar hizo un discurso haciendo eje en la responsabilidad de Callejeros y del cantante Pato Fontanet. A la vez, un grupito de familiares montó una provocación contra los partidos de izquierda, que ante el mensaje que llegaba desde el escenario, cantamos junto a sobrevivientes y familiares los clásicos de las marchas: “ni la bengala/ ni el rock and roll/ a nuestros pibes/ los mató la corrupción”. Y “griten todos/ unidad de los que luchan”.

La política de hacer responsable a Callejeros de la masacre es la que montaron desde el primer día los que buscan garantizar la impunidad para diluir la responsabilidad de Chabán e Ibarra. Sin ir más lejos, la Cámara del Crimen, en diciembre pasado, imputó a Callejeros con el mismo cargo que a Chabán, al mismo tiempo que revocó el fallo por homicidio que pesaba sobre varios funcionarios del gobierno de Ibarra.  Con la misma lógica, cada tanto vuelve a surgir la carga contra “el que encendió la bengala”.

En el anterior número de Socialismo o Barbarie, Santiago, de la agrupación AVISAR, dejaba en claro el sentir de sobrevivientes y familiares. “Acá lo que había era una red de corrupción entre el poder empresarial y el poder político. Entonces, el eje de la cuestión son las coimas, porque Cromañón tendría que haber estado cerrado.... Con respecto a Callejeros, la noche del 30 no vemos responsabilidad. Podía ser Callejeros como podía ser cualquier otro”. Santiago ponía orden sobre las cosas, más allá de su fastidio con el grupo por la actitud que tomaron después de la masacre. Pero esa discusión corre por otro carril.

Es fundamental impedir las maniobras divisionistas que buscan meter en la lucha de familiares y sobrevivientes la política de los encubridores que sólo generará confusión y desmovilización.

Ya bastante grande es la lucha contra la campaña que tiene como delfín al ex fiscal del juicio a los principales responsables de la última dictadura, Julio Strassera, que sin ponerse colorado acusa a los familiares de golpistas, en el marco de la maniobra de Ibarra de asociar a los que luchamos con Macri.

Debemos redoblar la lucha para que Ibarra vaya preso, para que se efectivice la condena a Chabán, para desenmascar al encubridor de Kirchner. Para que haya Justicia para los 194 muertos.